Cafe d'en Biel en Tossa de Mar

Todo perfecto. Pedí un helado de pistacho. y fui recibido por dos chicas muy agradable. Una mujer con gafas y un chica más joven y morena. Recibido como en mi casa. Muy recomendable

Lugar acogedor con entretenimiento y música de todas las épocas y países.

¡Genial! Muy buen servicio, comimos muy bien y el ambiente era idílico con buena música de fondo. ¡Gracias a Jacqueline y John porque fueron muy amables!

Estuvimos dando una vuelta por Tossa de Mar y nos llamó la atención este sitio para cenar. El ambiente era acogedor y nos sentimos cómodos desde que llegamos. El servicio fue de diez: todos muy simpáticos y atentos, lo cual siempre marca la diferencia. La comida nos gustó mucho, todo lo que pedimos estaba rico y bien presentado, y además las raciones eran generosas, cosa que se agradece. La carta tiene un montón de opciones, cuesta decidirse porque todo tiene buena pinta. En conjunto, una experiencia muy agradable. ¡Nos fuimos con buen sabor de boca y con ganas de volver! Muy recomendable!

La comida estuvo fantástica, ¡muy recomendable! Comimos pizza, pasta con hongos y pasta con mariscos ❤️

La comida estaba deliciosa. Nos pareció que el servicio era un poco excesivo y un poco gruñón. Aun así, lo recomendamos encarecidamente.

Comimos de maravilla. Las costillas, el bistec y el pan de ajo estaban deliciosos. Los precios son razonables y el ambiente es genial. ¡Sin duda volveremos! Para grupos grandes, reserven con antelación.

Fuimos allí solo para tomar algo, las bebidas eran muy buenas, 10/10 y la mujer que tomó nuestros pedidos fue amable, amigable, realmente no hablaba inglés, pero sabía qué traernos y fue muy amable y servicial. Definitivamente volvería allí a tomar algo, no es muy caro, las bebidas cuestan unos 7 euros, lo más barato que puedes conseguir al lado de una playa, el ambiente era genial, tenían su propio DJ y los camareros bailaban al ritmo :D volvería otra vez

El menú, al principio, parece atractivo y variado, pero la comida que sirven es entre mediocre y decepcionante: una ensalada compuesta prácticamente de hojas de lechuga, y la pasta seca con un poco de salsa. Sin embargo, está bellamente situado en una curva de la playa, con vistas al famoso castillo.

Fuimos a varios sitios, pero solo volvimos aquí. Después de unos cuantos, desistimos del resto. Por la noche, fuimos al bar; por la tarde, al restaurante. La comida estaba muy buena (no solo comparada con el resto, sino en general), y los postres también eran abundantes y deliciosos. Una gran selección de bebidas, deliciosas, y las de dos o tres ingredientes (no "cócteles") se preparaban delante del cliente, en la mesa (de forma eficaz y sin trampas, porque después de los primeros bares, asumí que "con alcohol" significaba sin alcohol 🤯). No esperamos nada, incluso cuando estaba bastante lleno; lo gestionaron con mucha eficiencia. El servicio fue amable y bastante numeroso :) Quizás haya mejores sitios; investigamos empíricamente, sin mirar cómo lo hacían otros, y lo pasamos bien. Es un lugar agradable, aunque evitamos la mesa bajo los altavoces; así se puede tener una conversación tranquila. ¡Lo recomiendo!