Bohemia Jazz Cafe en Granada

Ambiente relajante con pianos en directo la mayoria de los dias con jazz/ragtime

Este lugar es una joya! Ojalá hubieras más lugares con éste

Bar acogedor, hay deliciosa tarta de chocolate y variedad de té.

Un lugar muy agradable para disfrutar de la música jazz y tomar una buena bebida con amigos :)

Descubrí por casualidad el Bohemia Jazz Café, y fue como entrar en otra época. Nada más abrir la puerta, el olor a libros antiguos y madera me envolvió. El ambiente es tenue, íntimo, con una calidez que no se puede fingir. Hay muebles antiguos, fotografías de músicos legendarios, instrumentos clásicos decorando las paredes… y hasta un tocadiscos que parece susurrar historias de otra era. De fondo, jazz suave—y en mi visita, incluso un señor se animó a tocar el piano en vivo. Fue mágico. Entre libros viejos, luz baja, y ese aroma a historia, sentí que el tiempo se había detenido. Es el tipo de lugar al que volvería sola, con un buen libro o simplemente a pensar. O también con alguien especial, que sepa apreciar los silencios bonitos y la música que acaricia en lugar de sonar. Una joya escondida en el corazón de Granada. Lo amé.

Un lugar fantástico para tomar una copa, un café o un postre. Ambiente encantador, excelente servicio y deliciosas bebidas de todo tipo.

Precioso lugar, camareros super amables y simpáticos,cafés,batidos,cocteles buenisimos,relación calidad precio inmejorable; simplemente genia.

Un lugar fascinante!! Vives un momento atemporal!!! Te sumerges en otras vidas. Para repetir!! No question about that! It's a must in Granada. Una sola cosa en contra: el precio de un whisky de malta de 12 años, Knockando (nada del otro mundo, bueno pero normalito) a 15 euros...... una buena pasada. No más de 8-10 euros. Más sounds over the rainbow!

Un lugar muy ameno para tomarse un café o una cerveza. Tienen varios eventos de música en vivo, aunque el día que fui no había ninguno agendado. Las decoraciones y la selección de música le dan un estilo muy único al establecimiento, volvería sin dudarlo.

Lleva ya muchos años abierto, y sigue siendo un espacio único con muchísima personalidad. Un antro jazzero, con su piano de cola, su jukebox, y miles de fotografías y cuadros de actores y músicos. Los precios son caros, pero no hay otro sitio igual en Graná, así que toca pasar por caja.