Bodega Pepe en Bormujos

Amplio bodegón perfecto para comer en grupo. Es famoso por su mosto, especialmente en temporada (otoño) y por sus guisos tradicionales caseros. Abstenerse estómagos delicados.

Muy bien servicio al cliente Comida espectacular mis felicitaciones a los las cociner@s

La comida exquisita, buen ambiente familiar y el personal super amable ☺️

Segunda vez en Sevilla, segunda vez aquí... me encanta la comida... el servicio es súper rápido... 10/10

Todo de 10. Comida caserisima y de calidad. El servicio muy atentos. El mosto de cosecha propia Os recomiendo garbanzos con bacalao, la carne con tomate, las costillas deliciosas y de postre..la polea un descubrimiento. Volveré

Hoy hemos echo la comida de empresa. La comida buenísima y un gran trato por parte de Rocío. Amenazamos con volver

Uno de esos sitios con solera que aún existen en el Aljarafe, con el encanto suficiente como para ir a comer allí expresamente. Nos gustó mucho; tanto, que volvimos a cenar al día siguiente de nuevo. Es una bodega auténtica, que hace su mosto y lo vende a granel; también venden aceitunas. Su carta está compuesta por entrantes, chacinas, pescado frito, carnes y varias especialidades de entre las que destaca la carne con tomate: riquísima, un guiso casero de los que cada vez se ven menos. También pedimos solomillo al whisky, con una salsa estupenda (aunque es cierto que el segundo día volvimos a pedirlo y la media ración fue más pequeña); mero empanado al limón, muy suave y bien frito; croquetas caseras de puchero y jamón; chicos fritos, una buena ración; y también platos de patatas fritas, caseras y crujientes. La relación calidad-precio es buena, y la atención también. Tienen dos amplios salones, pero si vas en fin de semana es recomendable reservar, por si acaso. 100% recomendable, hay que apoyar estos sitios para seguir manteniendo la esencia de Sevilla.

Muy buena,se come muy bien y hay opciones para todos los gustos.

Excelente bodega que descubrí gracias a la ruta de la tapa. Amplia bodega con un ambiente tranquilo y familiar. El trato del personal fue EXQUISITO. El mosto casero está excepcional, sin duda una visita recomendable si pasas por Bormujos.

Un lujo de cocina tradicional y auténtica, con sabores de antaño, cocina hecha con cariño, con buenas materias primas. Un lugar que el tiempo y el buen hacer han respetado, consiguiendo mantener el arte de la genuina cocina de la abuela y el gusto de lo natural y casi legendario.