Bodega 1860 en Sant Cugat del Vallès

Muy bien atendidos, comida abundante y bien hecha.

Muy buena situación frente al mar!!! Carece de cierto orden y limpieza en el interior...

Los canyuts, la ensaladilla rusa, las gambas a ajillo y el chuletón me gustaron mucho

Me ha sorprendido. No me lo habían aconsejado, pero yo lo he encontrado muy correcta. Comer bueno, algo caro. Servicio bien. Volveré seguro

La calidad está bien, aceptable, el servicio pésimo. Hay 3 o 4 personas y no salen a la terraza estando esta llena. Están con los móviles dentro. Supongo que no estará el responsable y van así. Varias personas han tenido que ir dentro para pedir porque no salían…

Estuve el 13 de Septiembre y pedí unas gambas plancha calidad/precio muy correctas. Y de medio Rodaballo que estaba espectacular!!!!! La segunda vez que iba y repetiré seguro. X cierto la guarnición del Rodaballo patata al horno y Pimientos del Padrón de los de verdad que hacía tiempo que no comía.... Me atendió la camarera Mercé y tengo que decir que fue muy amable muy atenta y muy profesional en todo momento a pesar del tormenton que caio en la terraza y debido a ello toda las personas que estaban en la misma tuvieron que entrar dentro del Restaurante. El postre casero y delicioso. Torrija con crema catalana por encima acompañada de helado de Turrón. Nos vemos pronto Bodega 1860.

La comida esta muy buena, lástima que no cumplen la normativa de tener cartas en catalán, es obligatoria y no tienen ninguna, penoso!!

Tuve una experiencia fantástica en Bodega 1860. La comida fue sorprendentemente asequible, llegó rapidísimo y la calidad fue excelente, muy por encima de lo que cabría esperar por ese precio. El personal también fue muy amable e hizo que toda la visita fuera muy acogedora. Sin duda, una joya a la que vale la pena volver.

Cuesta un poco pillar mesa pero la espera vale la pena. Personal algo estresado y algo desganado, pero no todos. También se entiende porque se ve que no paran. Carta con bastante oferta de platos, y bebidas, tanto vinos como cervezas. Que se agradece salir de la rutina de pedir siempre la caña de rigor, que por cierto no estaba muy allá, según mi gusto personal. Recomiendo pedir botellines o un buen vino, o refresco. El entorno muy bonito y espacioso.

Super buen trato de los camareros, llegamos sin reserva siendo 8 y mientras esperábamos nos sacaron una caña. Súper buena atención y recomendanoos para repetiirrrr!!!!😊😊