Blue Collar en Torre-Pacheco

Personal muy amable, flexible a pedidos especiales, el filete es fantástico y, en general, una gran experiencia.

Buena comida a un precio razonable. Los postres no son muy buenos.

Fui a cenar con mis hijos, y nos encantó. Nos tocó una mesa en la terraza con vistas al resort y se estaba genial! Super atentos los camareros y la comida super rica. De precio, lo esperaba más caro, pero no, precios del estilo del Vips, Foster's.... Y con mejor presentación y más originales. Hay menú para niños. Quedamos super contentos. Volveremos. Gracias

Islandia con guarnición. Cucharas con vistas. No me puedo quejar.

Anoche, otro viaje genial con amigos a la zona de obreros. El servicio fue excelente y la comida estuvo increíble.

Buena experiencia, servicio fantástico y comida sabrosa

Fuimos a cenar, orientado principalmente a comensales extranjeros, cierra a las 23h. Tanto la carta como los precios son para público inglés, tienen variedad de entrantes y carnes. Las raciones son pequeñas en general. Hay 2 tipos de hamburguesas de ternera o vegetal. De los entrantes destacar los champiñones rellenos, el pastel de marisco muy picante hasta el punto de quitarle sabor. En nuestro caso el pollo con hierbas estaba bueno, pero tenía un sabor propiamente de la cocina indu lo que estropeó un pelín el plato. El banofee estaba bueno. Lo mejor la terraza que tienen, de noche se está de lujo. Un año después, hemos vuelto y escogimos camembert, langostinos y nachos. De postre, banofee. Todo rico y servicio correcto. Salimos a 22€/cabeza. Le subo una estrella

Esta vez, mi esposo había reservado una mesa afuera (para dos personas, por su cumpleaños) para las 7 p. m., y nos dieron una mesa en primera fila con una vista espectacular del campo de golf. Los camareros fueron muy atentos y los platos que elegimos (entrante y plato principal) llegaron sin esperar mucho. La presentación era muy atractiva (se come con los ojos) y la comida estaba buenísima. El tamaño de las porciones no tuvo nada de malo; era más que suficiente. Para mi sorpresa, los camareros me cantaron un feliz cumpleaños y me ofrecieron un delicioso trozo de pastel. Sin duda, volveremos.

Hemos estado aquí muchas veces y hemos estado muy contentos, pero esta noche, lamento decirlo, fue diferente. Nunca había tenido este problema, pero el nivel de sal en la comida, y especialmente en las patatas fritas, era muy desagradable y perjudicial para algunos. Devolví las patatas explicando el motivo; me las cambiaron y la segunda vez solo fue un poco mejor. Pedí que no me pusieran sal, pero no me la dieron. Por eso no pude comer la mayoría. No es necesario ponerles sal; el cliente puede añadirla si la necesita, pero estaba cristalizada y cuajada. Una ración de unas dos semanas. Mal.

He estado en el sector obrero varias veces, el servicio y la comida son muy buenos y siempre disfrutamos de la comida, el único inconveniente es que si lo comparas con restaurantes de la zona de la misma calidad, es un poco caro.