Bla Bla Cafe en Ferrol

Sitio elegante donde tomar un café o comer algo en la calle real de Ferrol

Precioso restaurante, en un edificio histórico. Un lugar emblemático de Ferrol donde se respira confort, con una relación calidad/precio excelente. Por decir algo, las croquetas del chef me encantaron, así como la tortilla, las ensaladas o sus pizzas.

He comida muchas veces allí. En esta ocasión pedimos unas pizzas y estaban buenísimas.

Fui a comer con mi pareja, pedimos croquetas y una pizza diavola. Lo positivo es la comida, bastante buena en general como suele ser aquí, aún que el precio suele ser un poco caro. El problema viene con la atención, ya que la camarera que nos atendió fue muy antipática, además de atender incluso a clientes que habían llegado antes que nosotros. Tardó unos 15 minutos en venir a nuestra mesa, con el local prácticamente vacío, a servirnos la bebida y cogernos la comanda. Las croquetas llegaron rápido, pero el problema viene cuando estuvimos esperando 35 minutos de reloj a qué nos recogiera el plato y nos diese la pizza... Para colmo, cuando nos dieron la pizza, la pedimos para llevar ya que nos era muy tarde, y a pesar de haber cajas de pizza en el local con este propósito, la camarera que nos atendió, y encargada del local, le dijo a una compañera suya que metiese la pizza en un tupper normal y corriente con la frase de "bien les vale así, no vayas a por una caja". Evidentemente la pizza luego toda desparramada en el tupper y con sus ingredientes separados. El sitio está bastante bien para ir a comer, pero la atención de algunas personas que trabajan allí, hace que la experiencia sea para olvidar.

Un café céntrico, muy concurrido, muy bonito. El desayuno aceptable. Lo peor la falta de personal. Un domingo por la mañana, con la cafetería y la terraza muy concurrida, y solamente dos personas trabajando. No hay derecho ese abuso de personal. Los pobres no podían hacer más, pero claro, el tiempo de espera.....

Sitio agradable, de tapa tortilla con la bebida a precio normal siendo Agosto, pero el baño de señoras muy sucio a las 12,30 de la mañana, olor a orina y la tapa era ya marrón de vieja y falta de higiene al levantarla. Los clientes valoramos no solo lo que se consume.

El lugar es hermoso buena decoración buen ambiente pero la comida no la recomiendo el bistec sin sal El pollo no estaba bien cocido y de precio me pareció elevado, la atención del camarero estuvo bien amable y pendiente de nuestra mesa.

La comida muy rica y la sacan rápido, aunque creo que de precio excesivo, pedimos 4 cosas para compartir y se olvidaron de un plato. Estuvimos 30 minutos esperando que el camarero saliese con los platos vacíos y otros 20 esperando la cuenta. Al final entramos a pagar. Comida rica, el ambiente bien, pero el servicio totalmente pésimo

Lugar acogedor con gran servicio, helados y excelentes tapas.

Lugar bonito, acogedor y con encanto con una decoración cuidada al detalle. Todo ello en un edificio de más de un siglo restaurado por completo. Me gustó, muy recomendable.