Besana Tapas en Utrera

Espectacular . Un 10. Solo ...eso de que te cobren por el agua por muy filtrada que sea.....no deja de ser agua del grifo y sale cara el agua .

Ofú, ofú! Y la gran pregunta que me hago es cómo puedo llevar tanto tiempo sin haber visitado besana tapas?, imperdonable. Vamos a empezar diciendo que el rinconcito de utrera donde encontrar besana tapas es un enclave con duende y con historia, el callejón del niño perdido. Puedes optar por las mesas altas exteriores o bien en el interior donde tienes la barra o las mesas. Mejor reservar con antelación porque en las horas puntas, siempre suele estar lleno. Voy a ir anticipando que no me resulta una opción especialmente adecuada si vas con niños porque la carta no está diseñada ni muy adaptada para ellos, salvo que sean niños (que por suerte haberlos, ahílos) con muy buena boca y quieran probar sabores y texturas diferentes a los habitual. Bueno, vamos con la manduca... Para empezar fuimos con 3 entrantes. El primero de ellos las patatas bravas....espectaculares es poco. La patata viene servida en forma de gofre y sobre ella se añaden las salsas mayonesa y de tomate, ambas totalmente caseras y todo coronado por un pimiento chipotle para que los más osados le inquen el diente. Un plato que te sorprende visual y gustativamente, que ya es mucho decir en algo tan simple a priori. Seguidamente nos pedimos la ensaladilla de gambas 3.0. Realmente muy buena, la patata en su punto, la mayonesa con los corales de la gamba y un buen puñado de camarones. Sinceramente no nos pareció que los camarones aportaran mucho más que un toque crunch, y visualmente no me mejora la elaboración más que si se le añade unas buenas gambas o langostinos. Para terminar con los entrantes tomamos el bao de puntillitas. De absoluta locura. El pan perfecto, la puntillita suave y con máximo sabor, la tinta negra mezclada con la hierbabuena...de película. Como platos principales fuimos primero con las albóndigas en salsa de trufa. Están suficientemente buenas como para no rechistar, pero el punto quedó ligeramente crudo en el centro y eso no se agradece en este tipo de elaboración, la salsa soberbia. Por último, nos marchamos el chipirón relleno de longaniza con alioli de pera. El chipirón, clavado en punto y sabor. Muy tierno, a la vez que braseado. El relleno de longaniza pues muy abundante aunque para mi gusto algo más seco de lo que me hubiera gustado, y el alioli de pera pues no le encontré el sabor de la pera la verdad. Para concluir la experiencia nos trajeron de postre la maceta de tiramisú. Sin duda el plato más flojo de todos. Visualmente precioso, con las cucharas a juego, simulando ser palas de jardinería, pero la textura no es la que esperaba en absoluto . Por supuesto el sabor es muy bueno pero se asemeja muchísimo más a unas natillas que a un tiramisú. Es todo prácticamente liquido exceptuando la capa superior que tiene café en polvo y cacao, parecido a comer cucharadas de cola cao. Para la siguiente ocasión probaremos elaboraciones diferentes para conocer bien toda la carta, ya que no es muy extensa. La atención del personal pues muy amable y atenta y el precio realmente estupendo. En definitiva Besana tapas es visita más que obligada en utrera y lugar que va a convertirse en un recurrente para mí, sin duda ninguna.

Nos lo pasamos genial, nunca habíamos comido unas tapas tan buenas en España y el precio es realmente más que razonable. ¡Una dirección que le recomendaremos! Y el personal fue muy amable ☺️

Solemos ir en moto haciendo ruta y conocer lugares nuevos y la verdad, este me ha sorprendido. Es un excelente lugar en el casco histórico de Utrera con tapas exquisitas, servicio excelente y el postre genial. Sin duda repetiremos. Le doy un 10, os lo recomendamos. Probad brioche de cola de toro, patatas bravas (una manera diferente de comerlas), arroz (con costillas, mejillones y anacardos), canelones...todo está riquísimo. TORRIJAS🤤🤤🤤🤤

En principio buen servicio aunque algo lento y la comida estaba bien. Pedimos el famoso donut de carrillá para terminar, con pensamiento de probar algún postre.Tras 30 minutos esperando, reclamamos el donut y para nuestra sorpresa ni se había apuntado. Nos dieron la opción de pedirlo de nuevo, dando a entender que tardarían, y no ofreciendo ninguna alternativa ni compensación por error. Visto lo visto,pedimos la cuenta y nos fuimos.

El mejor bar de tapas de Utrera. Cualquier cosa que pidas de la carta te sorprende más que la anterior, y los postres ya son punto y aparte. TODO PERFECTO!!

Buenas tapas y comida, bonito bar en una de las calles más famosas de Utrera sus paredes blancas su techo de madera sus bobedas y sus muros lo hacen un lugar entrañable donde es agradable la estancia el pan riquisimo de una de las mejores panaderias con su toque de horno, se encuentra al lado de uno de los bares más emblemáticos de Utrera, nuestro querido *NIÑO PERDIDO* una lástima que este cerrado

Estuvimos probando casi todos los platos y muy buenos, nos quedamos con ganas de probar algunos que ya no tenían, a destacar las albóndigas a la bourguignonne, el croissant ahumado con cochinillo, la ensaladilla de gambas, patatas bravas… y los postres, muy curiosa la torrija, que al destaparla sale incienso del tarro, todo muy bueno y original, simulando dulces siendo platos salados. El servicio lento, mi hija que es intolerante a la lactosa, para poder comer ciertas cosas se tiene que tomar una pastilla que le dura media hora y se tuvo que tomar 3, porque los platos salían con cuenta gotas. Los baños muy limpios.

Sitio con tapas originales y cocina de innovación. Lleva mucho tiempo abierto siendo fiel a su tipo de cocina y servicio. La comida buena, de precio alto. Lo malo es el local, que aunque está en un sitio bonito de Utrera, no tiene sillas, solo bancos altos en calle o barra y bajos en el salón lo que lo hace incómodo si como yo, no tienes el core desarrollado.. Un detalle que me ha sorprendido para mal y por lo que no le doy mas valoración es que la mesa que tenía reservada la montaron debajo de un aire acondicionado que nos goteaba agua encima y cuando avisamos no hicieron nada por solucionarlo, hicieron oídos sordos y tuvimos que comer aún mas incómodos.

Hemos comido estupendamente. Tapas originales , hemos probado 6 diferentes, a cual mejor. Los chipirones y el donut las más originales. Y de postre el bizcocho fluido para rematar la faena Ahhh, y la temperatura de la cerveza espectacular