Importante sobre este Bar es que cambiaron de dueño y los nuevos propietarios son muy amables y atentos. El domingo pasado fui a comer y quedé encantada. Pedí una sopa que estaba buenísima, de esas que te reconfortan de verdad. Nos atendió la dueña con muchísima amabilidad y se notaba el cariño en todo lo que hacía.
Las raciones son muy buenas, y tanto la carne, omg la carne!!!! como las arepas estaban geniales. De verdad que vale la pena venir a probar. Además, el ambiente es súper cool y hasta tienen una mesa de billar, lo que le da un toque especial. Totalmente recomendado. 🙌✨