Bar París en Jaén

​Patrimonio jiennense: Tapas gloriosas y un servicio... con carácter. ​El Bar París es una institución en Jaén. Si buscas experimentar la auténtica cultura del tapeo, con tapas generosas, tradicionales y de una calidad inmutable a lo largo de las décadas (¡esa patata rellena!), este es el santuario. Aquí se come como en casa de tu abuela, si tu abuela sirviera cañas perfectas. ​Y hablando del servicio... ¡Sublime! Los camareros del París han dominado el arte de la eficiencia zen. No espere gestos efusivos ni sonrisas de catálogo; espere lo justo y necesario. Es un servicio con una personalidad tan marcada que es casi una atracción turística más. Parece que han sido teletransportados directamente desde un bar de los años 80, donde el tiempo no pasa y la prisa es un concepto extranjero. ​Te sirven, te alimentan y te cobran. Sin florituras. ​En resumen: Vienes por las tapas legendarias y te quedas por la experiencia completa. El sabor es de 5 estrellas y el servicio, con su peculiar estilo, ¡también! Tómate tu tiempo y déjate llevar por el ritmo del París. ¡Un clásico que nunca falla! 🍻

Un referente en los Bares Clásicos en Jaén, sin duda alguna. Magnífica cocina y mejores tapas.

Clásico y barato, con buenas tapas y servicio estupendo

Uno de los pocos Bares en el que se pueden tomar "cañas EN LA BARRA". En el centro un lugar con un ambiente familiar y agradable, no te faltaran tapas en las consumiciones, tampoco vayas con prisas que todo llega, disfruta de la charla y pide raciones o tapas de su extensa carta de Cocina Casera y muy buena. No quedarás indiferente y volverás, Calidad precio inmejorable.

Bar de barrio muy cerca de la Catedral de Jaén. Ambiente familiar y de amigos. Mucha solera. Comida típica y correcta en el precio. Ricos caracoles. Los dos camareros, José y Blas, profesionales curtidos, no te faltará la tapa con tu bebida gratis, de vez en cuando, te arriman más tapillas y no te falta de nada, sí tomas cubalibres te ponen tu bomboncito helado y pipas para acompañar. Lis dos son muy campechanos y suena , a veces, un tambor para animar por ser aficionados al Real Jaén. Muy devotos de las procesiones que pasan por su puerta. Te sentirás muy bien aquí.