Bar La Sang en Palma de Mallorca

Ambiente maravilloso y relajado, vinos excelentes. Camareras encantadoras, e incluso nos regalaron aceitunas al final.

¡Buen lugar para cenar! Solo vinos naturales por copa.

¡Un lugar genial! El único lugar en Mallorca que ofrece vinos orgánicos, con muchos productos locales y extranjeros, ¡y comida fantástica! Un agradecimiento especial a Zsófi, la camarera húngara, por tomar las riendas de nuestro destino con su gran profesionalidad. ¡Sin duda recomiendo este lugar a cualquiera que esté abierto a una nueva experiencia vinícola y pueda alejarse de las experiencias que ofrecen los vinos convencionales! <3

Un bar de vinos genial. Comida deliciosa, ambiente encantador, amplia selección de vinos. Nos adaptaron a celíacos. El personal fue amable y servicial.

Sitio de vinos naturales, por tanto te tienen que gustar. Los platos que acompañan los vinos está muy bien para compartir. El servicio muy agradable, ayudándote a elegir los vinos, etc. sitio tranquilo para charlar con pareja o amigos.

Este lugar es imprescindible si te gusta el vino natural. Tuvimos un servicio excelente, comida deliciosa y muy buenos vinos para elegir. El personal fue muy amable al recomendarnos vinos y nos permitió probar cualquiera que nos resultara difícil decidirnos.

Cené aquí con mi pareja al día siguiente de nuestra promesa y lo recomiendo muchísimo. La comida, el vino y el servicio fueron perfectos. El postre de higos Eton fue una delicia. La camarera rubia (que creo que dijo ser húngara) fue encantadora. Nos explicó los vinos de maravilla y nos hizo excelentes recomendaciones.

Me gusta el Bar La Sang por varias razones: la decoración es de primera y la carta de vinos es de 10. Sin duda, lo considero un restaurante para amantes del vino. Si no bebes alcohol, quizás este no sea tu sitio. La carta es corta, pero está muy bien cuidada y presentada con esmero. Un concepto original y moderno en Palma.

No te arrepentirás de venir aquí. Todo estuvo perfecto :)

Un lugar realmente especial que me alegra haber descubierto a última hora. Comí una Paloma y unos tacos, ya que era la noche mexicana especial del chef. También tomé una deliciosa copa de vino tinto ligero. Es un espacio precioso y el personal es increíblemente amable. ¡Volveré, gracias!