Pirri es un fenómeno, gran cocinero y gran actitud, aunque suene egoísta hay que aprovechar a estos cocineros que ya quedan pocos, cuando se jubilen se irá perdiendo la cocina tradicional. Sigue así amigo, además muy buen ambiente de barrio, muy recomendable, además Pirri siempre está atento para que no te falte de nada y aunque esté comiendo se levanta sin quejarse a atenderte.