Bar La Bola en Ronda

¡Hola! Este fue el primer restaurante que visitamos al llegar a Ronda. Fue un poco decepcionante, pero les cuento por qué. El ambiente estaba bien, pero hacía frío y había un calefactor apagado junto a nuestra mesa. No sé si querían ahorrar gas, pero eso hacía que estuviera frío mientras que en otras mesas sí tenían calefacción. Quizás haya que preguntar, pero creo que es lo normal, sobre todo con otras mesas con la calefacción encendida. El servicio fue bueno. El camarero nos atendió con frecuencia y fue muy amable. En ese sentido, ninguna queja. La comida fue muy decepcionante: la quesadilla de pollo tenía trozos grandes de pollo y parecía más un taco que una quesadilla. El arroz biryani de pollo sabía a rancio y estaba frío. Lo mejor de la comida fue el pan de ajo, que tardó bastante en llegar. En resumen, si tienen hambre y no hay nada más abierto, pueden comer aquí, pero si hay otras opciones, ¡les recomiendo elegir otro sitio!

Un momento agradable. No esperes una cena elegante, pero la comida estuvo bien. El camarero tuvo la amabilidad de dejarme cargar el móvil. Filete de ternera con patatas fritas. El precio era razonable. Gracias.

Bar en pleno centro turístico de Ronda. No es un restaurante de lujo ni nada de eso, es un bar para comer en plan guiri a cualquier hora, cosa que hacemos también los españoles sin prisa. La comida está bien y el servicio es bueno, gente agradable, aunque a las 6 de la tarde no tienen bulla. Lo dicho, no está mal.

Delicioso café helado (con dos bolas de helado de vainilla) y excelentes baguettes para el almuerzo. Un camarero encantador.

No entiendo tantas opiniones negativas, la comida está bien y el trato es bueno.

Muy buena experiencia Excelente comida y bebida Precios económicos Lo recomiendo y quiero volver

Bar con comida sencilla a buen precio. Terraza en la calle.

La comida estaba deliciosa y el personal era amable. Estaban encantados de ayudar y comprendían mi mal español. Los camarones, las tapas, los espaguetis a la boloñesa, el helado y el churro con chocolate (similar a nuestro pudín de chocolate) estaban deliciosos. Los precios son bastante altos, pero hay una pizarra en la pared y el personal reparte el menú para que puedas consultar los precios antes de pedir.

El servicio fue pésimo. El camarero actuó como si no le importara en absoluto la atención. No dijo ni una palabra mientras servía el café. No preguntó a los clientes si la comida estaba buena o si todo estaba bien. La comida estaba buena, aunque algunos platos estaban mal presentados. Los camarones estaban muy ricos; muy recomendables.

Más barato y bueno! El personal muy simpático!!!