No le pongo 10 estrellas porque no puedo.
Bar tranquilo, sin agobios y con una comida casera y riquísima.
En el menú del día pedí lasaña (buena no, lo siguiente) y escalope (super crujiente y tierno). Además de que entra una pequeña ensalada, una bebida y el postre. El precio súper bueno, 12€.
La atención del camarero, impecable.
Volveré sin duda
Un bar restaurante local estupendo. Comí un delicioso almuerzo de salmorejo, ensalada, filete de merluza fresca con patatas fritas, café y dos cervezas pequeñas: ¡14 euros! No hablan inglés.