Bar El desván de Bargas en Bargas

Nos a encantado lo recomiendo 100%.Buscábamos algo que estuviese fuera de Toledo en dirección Madrid y lo vimos en Internet llamamos ya que hora de comer e íbamos 9 personas, no nos pusieron pegas y encantado la comida muy buena casera manchega nos ate dieron con mucha amabilidad y el precio baratillo, volveremos seguro de Madrid estamos a media hora en coche , esta en el centro del pueblo de Vargas al lado de ka iglesia.

nos ha gustado mucho y la atención buenisima! la comida, tanto los torreznos como la ensalada de pimiento rojo un 10

Nos hemos sentido como en casa , tanto en servicio como la comida increíbles . Relación calidad/precio buenísima . Un acierto comer en “ El desvan de Bargas”

Buena comida, cantidad y personal amable

Este lugar es realmente hermoso, Javier, regente del negocio es un gran caballero, cálido y amable, la barra NO podía estar MEJOR atendida, el ambiente rústico y acogedor. Comí los mejores TORREZNOS de toda mi vida y el PULPO me hizo viajar a Galicia. Experiencia MÁS que recomendable!!!

Muy buena cocina y un personal super atento y amable. Aconsejado para comer bien a un precio muy razonable.

El cazón exquisito, solo por ello volveré, gracias por alimentar me

Hoy hemos vuelto a repetir!!! Éramos 13 y como siempre, encantados. Sitio acogedor, como en casa. Perfecto para ir con familia o amigos y disfrutar de una buena cocina casera y con un trato estupendo. Gracias por la atención!!! Volveremos!!!

Comida buenísima, cantidad increíble . El servicio muy cercano y muy amable. El ambiente muy bueno yw hemos ido varias veces y la primera vez te esperas un bar de pueblo más , entras y es condecoración de cosas de pueblo pero lo más importante el la bienvenida de la camarera que te lanza una sonrisa al entrar y al salir te despide con una bocina que te saca una sonrisa . Gracias porque estuve muy agusto en mi cumple.

Me tenían ganado con sus torreznos espectaculares, pero descubrir su carta y probar la ensalada de asadilloanchego fue todo un acierto. Se notan los productos frescos y el toque personal del cocinero. Un trato fenomenal, siempre volveremos