Bar Duna en Miramar

Fuimos recomendados por unos amigos, comimos muy bien, la comida casera, muy buena, el servicio rápido y amable, la chica que nos atendió muy simpática y atenta. Muy recomendables las patatas Duna y las croquetas caseras.

Sitio muy agradable, las camareras muy simpáticas y la comida está muy rica. Hemos probado las patatas duna y los calamares. Muy recomendable 😉

Nunca habíamos estado anteriormente y nos decidimos para probar las patatas. Las recomendamos completamente, ya que son totalmente diferentes a las de cualquier sitio y están muy buenas. También pedimos unos calamares que estaban muy buenos. 100% recomendable

Nos atendieron sin reserva en fin de semana a hora punta para comer. Afortunadamente tuvimos una mesita para dos y la atención fue muy agradable. Hay mucho personal y todos y cada uno de ellos son muy trabajadores y atentos. La comida estaba bien, sobre todo los chipirones, la ración fue bastante grande y estaban deliciosos. Para mi gusto, el arroz no estaba muy logrado.. demasiado caldoso. Pro a mi compañía sí que le gustó.. cuestión de gustos, supongo. Eso sí, la ración también fue bastante y nos sobró un taper Repetiría pero pidiendo otro plato principal

Magnifico lugar para cenar y el trato de todas las camareras en esoecial; a Cristina una gran profesional y con una simpatía excelente volveremos y recomendamos el mejor restaurante de playa Miramar😊🏖️🌊😍

Comida rica, sobre todo las patatas, pero al pedir la parrillada, la encontramos escasa debido a su alto precio, 40€, 4 sardinas, 4 rodajas de calamar, 8 chopitos, una sepia enana, un trozo pequeñísimo de emperador y 4 gambones. Creo que por el precio que cuesta debería de llevar más cantidad. Bien elaborada, aunque las sardinas estaban un tanto secas, las debieron pasar demasiado en la plancha. Las patatas un acierto por lo ricas que están y por su relación calidad precio.

Un ambiente muy agradable y calidad y precio

Excelente servicio y calidad de producto. Las camareras muy simpáticas y atentas Volveremos sin duda.

En Miramar , playa tranquila aunque urbanísticamente un poco fallida buscábamos para cenar. Paramos en un bar, que no restaurante, a tomar algo, y acabamos cenando de raciones. La atención fue correctísima, y las raciones ideales. No es un restaurante muy especial, pero todo es correcto. Raciones bien hechas, no aceitosas, ni rancias, sardinas frescas, patatas geniales etc... En pocas palabras, un acierto que no nos esperàbamos. Además en segunda linea de playa que aunque no se vea el mar se oye de fondo. Coste con postre y café incluido entre 15-20 euros. Servicio muy bueno. Aunque era temporada media.

Muy buen lugar!!! Todo lo q comimos fue muy fresco y tenia ese sabor de hecho casa, muy muy rico. Camarera super amable