Bar Da Vinci en Huesca

Mientras buscábamos un restaurante en Huesca, nos topamos con Da Vinci y fuimos a ver la carta. La camarera nos atrapó enseguida (aún no habíamos decidido si comer allí 😅) y nos sentó en una mesa. Había una barrera lingüística total: ninguno de los dos hablaba más de dos palabras en el idioma del otro. A pesar de ello, tuvimos una conversación fructífera y le mostramos cómo usar Google Lens para traducir nuestros menús; ¡incluso nos preguntó cómo usarlo en su móvil! Había una selección enorme de tapas, pero muchas opciones no estaban disponibles. Como gran amante de los calamares, me decidí por una de las dos opciones: una, los Calamari Da Vinci, estaba rebozada, mientras que la otra, los Calamari Romani, no (ni siquiera lo sabía, así que seguro que hay más diferencias). Lo descubrí porque mi amiga también quería calamares, así que pedimos y compartimos los dos. Estaban deliciosos. De hecho, mis Calamari Da Vinci llevaban una patata, ¡pero quién soy yo para quejarme de comida extra gratis! Sin duda volvería para probar más opciones del menú.

100% recomendable. El mejor sitio para almorzar con oferta de desayuno!!! Riquísimo, rapidísimo y muy amables

Menú espectacular. Alcachofas buenísimas, croquetas deliciosas y tarta de quesoo para chuparse los dedos.

A destacar el interés por agradar por parte del personal. Por concretar, hay una empleada llamada Pilar, que es espectacular la atención que ofrece. Mil gracias.

Llevamos unos días relajándonos en Huesca. El sábado por la noche, nos divertimos mucho, y encontramos las tapas más fabulosas aquí a la mejor relación calidad-precio: una de queso de cabra con cebolla, una de pulpo con patata y una croqueta de tinta negra. Ojalá podamos volver antes de irnos. El servicio fue estupendo, aunque probablemente molestamos un poco al personal, que, a pesar de estar muy ocupado, fue encantador. Hasta el lunes 🇪🇸🇪🇸

Un descubrimiento maravilloso en el corazón de Huesca. ¡Gazpacho para chuparse los dedos! ¡Y platos típicos de la zona! Servicio eficiente y amable. Disfrute de su comida en la terraza. Calle tranquila.

Buen menú por 17€, incluye agua y vino. Buen servicio.

Muy buen restaurante pequeño. Lo recomiendo.

Restaurante en mi opinión muy recomendable para tapear, pues dispone de una amplia gama de tapas. Personal muy amable y atento. Repetiremos 😋

Era domingo y habían pocos sitios abiertos. La terraza de este lugar estaba a tope asi que entramos a su interior, que tambien estaba bastante lleno. Local grande y clásico. Servicio lento. Varios camareros algo desorganizados. Ambiente jaleoso. Empezamos pidiendo un vino y una cerveza. Y mas tarde pedimos otra ronda y un par de croquetas (de calamar y gallina) que no estaban muy calientes, y en cuanto al sabor, sin mas, no destacaban. Y una bola de carne, parecida a lo que en Catalunya llamamos bomba, hecha con puré suave y carne picada y picante en su interior. A mi me gustó bastante. Cuando nos íbamos vimos mesas que pedían torradas y otras tapas. Sería un sitio para explorar mas su carta de tapas.