12/06/2025: Fuimos por la mañana a esta cafetería sin grandes expectativas, simplemente buscando un café que nos despertara un poco… y salimos con el alma revivida, el estómago feliz y una sonrisa en la cara. Y no, no exagero (bueno, un poco, pero se lo merecen).
Primero, hablemos del trato. ¿Sabéis esa sensación de llegar a un sitio y que te traten como si fueras el primo favorito que viene de visita? Pues así. Amables, atentos y con ese arte de saber estar sin agobiar. Un 10 en atención. Yo ya estaba listo para invitarles a la cena de Navidad.
Ahora, las tostadas… madre mía las tostadas. Crujientes por fuera, suaves por dentro, y con un untado de tomate que parecía hecho por abuelas con superpoderes. Tan buenas que tuvimos que mirarnos en plan: “¿Está bien lamer el plato en público?”. (Spoiler: no lo hicimos, pero por poco).
Y el café… ¡el café! Qué cosa más rica, cremosa, aromática, con ese sabor que te despierta hasta los pensamientos. Yo que soy medio zombi por las mañanas, después del primer sorbo ya estaba hablando de filosofía y recordando contraseñas olvidadas. Probamos tanto el café con leche como uno con hielo, y los dos eran puro amor en taza.
La terraza es tranquila, con buena sombra, y perfecta para ver pasar la vida sin prisa mientras disfrutas del desayuno. En resumen: si estás buscando el sitio ideal para empezar el día de buen humor, este es el lugar. No solo por lo que sirven, sino por cómo lo hacen. Volveremos, sin duda.
15/05/2025: Un sitio muy agradable ya sea para tomar un café o comer, es muy acogedor y un servicio muy agradable.