Bar Blanco Restaurante Marisquería en O Grove

Raciones sobradamente generosas y muy ricas en un ambiente familiar, amabilidad de 10. Todo a un buen precio.

El posadero lo da todo, incluso los invitados habituales que nos despidieron con canciones en español. Percebes por 1/4 kilo 18 euros.

En este restaurante se come muuuy bien, abundante,el producto es de 10,pedimos mariscada para dos y nos tuvo que poner parte para llevar,no la pudimos terminar El servicio: su dueña es sencilla, agradable, te sugiere lo que debes pedir, rápida Lo hemos conocido al finalizar la estancia en esta zona,pero para el año que viene repetiremos sin duda!

Restaurante de apariencia modesta, con distintos espacios: terraza con bastates mesas, interior planta de abajo con pocas y planta de arriba diáfana que no visitamos porque había poca afluencia esa noche. Mi pareja pidió sopa de pescado que le trajeron en un puchero, para servirse ella misma. Contenía arroz y rape y por lo buena que estaba (segun ella) decidí pedirme otro plato para comer yo tambien, aunque me cobraran otos 4,50€ por ella. Mereció la pena, porque estaba hecha a estilo casero, buena y calentita, lo que nos entonó a esa hora fresquita de la noche, después de un dia de playa. Pedimos también ensalada mixta, que aparte de lechuga, tomate, cebolla y atún llevaba trozos de queso semicurado, lo que le dio un toque original. Por último, fritura de pescado que llevaba dos trozos medianos de rodaballo, dos de merluza, dos o tres de rape y uno de lenguado (o lenguadina). A mi parecer bastante generosa y buena para los 12 € de precio. Con una botella de agua grande, una copa de ribeiro y dos infusiones la cena nos salió por menos de 33 euros. Dejamos algo de propina, claro: Hacía tiempo que no cenaba tan bien y tan casero por ese precio. PD: No pudimos pedir alguno de los postres caseros que tenian, por haber quedado demasiado llenos, pero pensamos volver para probar esa tarta de queso con naranja, o la de chocolate o la de la abuela...

Restaurante cafetería muy tranquilo, con una terraza amplia en verano, que está bien si estás en la zona y no tienes prisa. Tiene bastantes opciones de marisco y pescado, y no resulta para nada caro. Pedimos navajas, calamares fritos y chuletón, la materia prima es buena y las raciones abundantes, la cocina puede mejorar.

El que le guste la mariscada, ya sabe.

Un sitio estupendo con una vista y ambiente espectacular.

¡Nos encantó! Encontramos este restaurante de casualidad y la verdad que volveremos seguro en nuestra siguiente visita a Galicia! El chico que nos atendió muy agradable, y la comida estupenda!

Gran descubrimiento. Apartado....tienes que conocerlo solo por la calidad del producto

Bar familiar y comida casera. Todo muy bueno y precios contenidos. Recomiendo asistir a primera hora,el servicio se resiente cuando las mesas se llenan.