Bages 964 Oller del Mas en Manresa

Esta bien el sitio y se chulo, pero te hacen esperar mucho, la última vez, que estuve, me trajeron el segundo plato frío, lo mejor de todo el servicio de barman, que el chico que de cócteles sabe de que va es un maquina, les expectaculares, la comida normal, lo encuentro caro para lo que pagas, lo mejor también las postres. El pastel de queso, valoración un 8 de todo.

Restaurante bien situado rodeado de naturaleza y con unas preciosas vistas a la montaña de Montserrat, también tiene un campo de golf, piscina, pistas de pádel y gimnasio, nosotros hicimos el menú degustación, en este caso valía 85€ por persona, tengo que decir que la mesa de quesos era aparte, 8€ de suplemento, al final tengo que decir que amables y correctos, nos gustó mucho la experiencia, seguro que repetiremos.

La comida espectacular, estuvimos varios días en comida y cena y lo único que fue un poco de peor calidad fue un pescado que pedimos pero muy bien en general

Todo ha sido excelente, menos la profesionalidad del somalier, q su intervencion al pedir una copa de vino q llevara sirach, casi nos envia a comprar vino al dia, y ni tan solo nos ha indicado de que vino nos servia el vino, increible😅😅😅y nos ha qerido dar vino sin alcohol q menos vino es cualquier cosa

La comida está súper rica y las visitas desde la terraza son preciosas. La verdad que es una pena que el servicio sea muy lento en muchas ocasiones: te sirven el vino tarde, tuvimos que levantarnos pq nadie nos cobraba, demasiado tiempo entre plato y plato.. en cualquier una muy buena opción; excelente si consiguen mejorar el servicio ñ.

Menu degustación muy bueno si te gustan las salsas. El sitio es increíble, hacen orgullo de la tierra que nos rodea :) volveremos :)

CRÍTICA GASTRONOMICA JOAN - EXPERIENCIA GASTRONOMICA EXCELENTE ENTRE VIÑEDOS Vamos un martes a menú en el Wine Bar a 35€ con agua y pan incluido. Muy elegante y tranquilo vistas a las viñas y campo de golf y de fondo la silueta de Montserrat bucolico. Aperitivo de bienvenida, torreznos. Primero, ensalada de tomate cor de bou y atun rojo confitado, con helado, delicioso. Yo rossinyols salteados com crema de celeri, huevo poche y papada de cerdo confitada, brutal. Segundo, lubina a la brasa fresca y muy rica y yo medallon de cerdo con salsa de foie y parmentier de setas, delicioso, en su punto de cocion. Postre ella pastel de queso de cabra curado km 0 con helado de ratafia y nueces y yo texturas de chocolate. Servicio àgil e impecable. Gracias por hacerme disfrutar tanto de una comida. Mis felicitaciones a todo el equipo.

Como si no fuese suficiente con el entorno, quiero destacar la calidad del servicio de todos especialmente de Francesc que ha resultado “ la guinda del pastel”. La comida y los vinos degustados excelentes. Hemos quedado muy complacidos al 100 %. Sitio muy recomendable.

Un restaurante de 10 en todos los sentidos. Es una experiencia gastronómica en sí; el ambiente, el espacio, el servicio, la comida, las vistas... Es un entorno privilegiado y lo cuidan cada día como en su casa. Todo el mundo del restaurante, absolutamente todo el mundo, cuando hacías contacto visual, te sonreía y eso a día de hoy, es impagable

La comida exquisita con muchos detalles que diferencian al restaurante para bien