ATHENEA BAR en Sevilla

Hemos comido la camida de empresa y todo perfecto

Todo espectacular, muy bien servicio, y muy atentos. Iba recomendado pero salí con mejores sensaciones aún.

Muy buenos desayunos con gran variedad.

Muy buena atención por parte de juanan y la comida de 10.

El domingo fuimos mi pareja y yo a almorzar aquí. Teníamos el día cruzado porque hacía poco se nos había ido un familiar .. pero la atención y la comida de este sitio nos quitó la pena durante el rato que estuvimos ahí. Nuestro camarero Alejandro un máquina, ese te vende una casa si él quiere. Super atento, super simpático, un día difícil como es un domingo de derbi en el barrio, y a él no se le quitaba la sonrisa de la cara y no nos faltaba ni una cortaita. Todo lo que nos recomendó fue lo que pedimos y acertó en TODO. Hasta en los postres. La torrija buenísima pero ese coulant de pistacho: increíble. Quiero mencionar también a todos los demás camareros porque como buena trabajadora que soy de la hostelería.. los observo mucho. Y se percibe buen ambiente y se nota que no te va a faltar de nada con ellos. Muchas gracias! Posdata: los desayunos los tienen también buenísimos que somos clientes de sus desayunos, sobre todo la PRINGA.

Muy contenta siempre con la comida y el servicio, Juanan nos atiende siempre muy bien

Hemos celebrado la comidas de compañeros y la verdad que está todo riquísimo. Y el servicio espectacular. Lo recomiendo totalmente.

Lee con atención este comentario. No te lo pienses y ve. En su carta encontrarás comida sin gluten y, otras intolerancias. El personal da un trato increíble y cercano. El restaurante tiene terraza y local interior. En nuestro caso, éramos 4, nos pusimos las botas comiendo destacamos el vino, el solomillo al roquefort, las lagrimitas de pollo, las croquetas, los brioches (gluten), el risotto y el coulant de pistacho con helado. Nos gustó tanto que, al día siguiente fuimos a desayunar y nos quedamos más encantadas todavía. No dudéis en ir. Atentamente el escuadrón suicida.

Carta muy variada, platos muy ricos y a buen precio y camareros muy simpáticos. Lo que más nos gustó fue el abanico ibérico y las patatas bravas. La torrija estaba buena, pero no nos pareció sorprendente, y creo que fue porque el dulce de leche. Quizá probaría a usar otro sirope. Me quedé con ganas de probar otros platos que vi en las mesas de alrededor, así que volveré más pronto que tarde.

Gran variedad en desayunos, comidas y cenas. Bebidas al gusto de cada cual. Lo mio es la cerveza, y tienen la mejor y más fría de la zona. Servicio magnifico, aun cuando estén a tope, lo tienen todo controlado y sirven con mucha agilidad. Ambiente familiar y de amigos, cada cual a lo suyo. Cómodo y cercano.