Asador Pasiego en Zaragoza

Nunca falla! Todo lo que hay está buenísimo.

Uno de esos sitios donde lo que manda es el producto. Carne de calidad, hecha a la brasa con el punto justo y sin disfrazarla con florituras. El cachopo es una apuesta segura cada vez que venimos: generoso, bien hecho y con sabor a lo que tiene que saber. Pero si hay algo que no perdonamos nunca al final, es el flan de queso. Casero, cremoso y brutal. Sitio honesto, sin tonterías, de los que cuesta encontrar.

Buen ambiente,buen servicio txuleta normal

Todo estuvo buenísimo. Pedimos entrecot y chuletón de buey, y ambos estaban espectaculares. De entrantes, tomamos gazpacho —que preparan con tomates asados—, foie y un paté de sardinas que te sirven de bienvenida, todo riquísimo. Además, la camarera que nos atendió fue encantadora. Y para rematar, el precio nos pareció muy razonable. ¡Todo perfecto!

Riquísimo cachopo, excelente solomillo de buey y muy buena tarta. 👌

Muy buenos los entrantes, la Santoña, la ensaladilla rusa y la ensalada de pimientos, así como el chuletón. Está bien el cachopo pero no espectacular. Los postres (crema pasiega y tarta de queso) no están a la altura de los platos de la comida. El local y el servicio muy bien. El precio correcto. Para repetir sin duda.

Restaurante ubicado en el centro de Zaragoza. Carta suficientemente amplia y servicio rápido, atento y agradable. Difícil aparcamiento en la calle, aunque hay varios parkings privados en la zona.

Estaba todo riquísimo. Aunque no esté en las fotos terminamos con unas tablas de queso espectaculares. Riquísimas las anchoas, las croquetas y lo que más nos gustó fue la carne. Sin palabras, en su jugo y en su punto. Este lugar merece una visita sin dudas y degustar los platos que tiene en la carta, nos quedamos con ganas de más.

Una experiencia interesante.Creo qué repetiré para degustar otros platos. Ya es la tercera vez que que vuelvo y meforan cada vez que voy

Un poco descontento por la recomendación de la camarera de sala. Ayer (15/03/25), estuvimos comiendo un grupo de 12 personas (10 hombres y 2 mujeres) y pedimos unos entrantes de longaniza, unas ensaladas y 3 cachopos para compartir. La camarera de sala nos dijo que igual 3 cachopos para 12 personas se podía quedar corto. Nos preguntó si éramos buenos comedores, le dijimos que sí, vamos lo normal. Al final, siguiendo su sugerencia, nos pedimos 4 cachopos. La cantidad de cachopo fue exagerada. Nos sobró un cachopo entero y un poco de otro. Son cachopos de dos palmos de largo con su base de patatas fritas. Teniendo en cuenta que cada cachopo cuesta 60 euros, nos colaron el cuarto cachopo por toda la escuadra. Cierto es que fuimos nosotros quien pedimos el cuarto cachopo, pero siguiendo sus sugerencias de cantidad. Lo profesional hubiera sido que nos hubiera servido 3 cachopos y luego si avanzada la comida y veíamos que nos quedábamos cortos, pues pedir un cuarto cachopo (porque tampoco es que tarden mucho en preparar y cocinar otro cachopo). Pero no nos dio esa opción. Cuando te dejas aconsejar por un profesional del establecimiento quieres pensar que lo hace con idea para satisfacer al cliente, pero os puedo asegurar que con 1 cachopo para cada 4 personas es más que suficiente, porque siempre comes algo más: ensalada, algún entrante o así. Ella argumentaba en su favor que le habíamos dicho que éramos buenos comedores. Os puedo asegurar que comimos hasta reventar. De hecho no pedimos postres, que es algo que siempre apetece. De hecho algunos ya ni cenamos ayer. Los cachopos estaban muy buenos y toda la comida, pero no me gusta sentir que me han colado un cachopo de 60 euros por una mala recomendación de la camarera de sala. Por lo demás todo bien.