Aponiente Ángel León en El Puerto de Santa María

Magnifica experiencia, magnifico lugar y magnifica comida. Sin embargo, nos encantaria destacar el equipo humano tan cercano y accesible que teneis. Fue un verdadero placer!

La experiencia ha sido fabulosa. El trato y ka atención muy bueno, atentos, amables, muy profesionales y muy cercanos. El menú de gustarían de 10, platos muy elaborados y originales, bastante completo y de gran variedad.

Un sitio único e irrepetible. Los camareros/as, un diez. La comida otro diez. Y el enclave único.

Solo los grandes entendidos de la mar pueden degustar lo que se vende en este gran restaurante

Cenar en Aponiente es probablemente una de las cinco mejores experiencias gastronómicas de mi vida. No tengo la capacidad de describir con precisión lo maravilloso que fue todo, pero fue justo lo que esperábamos. El personal y el servicio fueron perfectos (¡Muchas gracias a Ana, Susana y al sommelier Juan Gabriel!). El comedor era sereno, hermoso, relajado y se sentía privado e íntimo. Cada plato tenía un increíble y sorprendente equilibrio de sabores. ¡Simplemente delicioso! Nos alegramos mucho de haber pedido el maridaje con vinos locales, porque tuvimos una introducción excepcional a muchos jerez excelentes que nunca antes habíamos probado. Ahora, apreciamos mejor lo que los jerez tienen para ofrecer. Gracias a todo el personal de Aponiente por hacer del cumpleaños de mi esposa una ocasión tan especial e inolvidable.

Para mí ha sido un sueño cumplido y no me ha decepcionado. La comida buenísima y el sitio precioso, pero sobre todo, destacar el trabajo de la tripulación de A poniente, hacen que todo sea perfecto

"Imagina que no hay tierra... y que solo puedes vivir y alimentarte del mar. Eso es APONIENTE". La frase en su página web y publicidad suena muy acertada, y después de ver muchas entrevistas y artículos sobre el chef León y su equipo, tenía muchas ganas de ir y descubrir a qué venía todo ese revuelo. Si antes sentía curiosidad, ahora estoy OBSESIONADA. Desde antes de entrar en la propiedad hasta el último paso en la calle, el personal de Aponiente te trata como reyes y reinas. Pero aún mejor, porque creo que se divirtieron más con nosotros que con el Rey. Para ser un restaurante con 3 estrellas Michelin, Aponiente tiene un ambiente muy relajado. Sin pretensiones y cómodo, incluso mientras atienden todos tus caprichos. Tuvimos un sumiller fabuloso (Juan Gabriel) que nos presentó cada maridaje con una gran sonrisa, y sus descripciones e historias de los vinos parecían haber sido creados por él mismo: el orgullo y la alegría de su trabajo brillaron durante toda la velada. Ana fue nuestra camarera principal y nos deslumbró con sus chistes acertados y su cálida personalidad. Cuentas con todo un equipo de profesionales durante toda la comida, y me encanta la sensación de tripulación de barco que se respira en el precioso edificio. ¡Ah, seguro que también querías saber sobre la comida! Una auténtica locura. El chef León es un genio creativo. Debes saber que todo el menú (18 tiempos en el que probé) está hecho con ingredientes marinos. Los entrantes, el plato principal y los postres son todos platos con ingredientes marinos. Me gustaron mucho 15, 2 estaban bien y uno no me gustó ni lo terminé. ¡Esas son probabilidades increíbles con un menú de 18 tiempos solo con ingredientes marinos! Adjunto fotos de todo. Empezamos nuestra visita siendo recibidos en la puerta principal y nos llevaron a un salón para nuestro Möet de apertura y 4 entrantes. Pedimos el paquete de maridaje "Non Plus Ultra", que incluye maridajes más sofisticados, y también tienen otros paquetes. De camino al comedor principal, nos dieron un tour por el edificio. No voy a revelar nada, pero tiene historia, mucha personalidad y mucho encanto. Les daré fotos del menú y los platos, porque mientras escribo esto, están a una semana de cerrar para la temporada 2025, y cuando regresen después de las fiestas, el menú será completamente diferente al que publico. Así que mis fotos no importarán, ya que no se repetirán, y seguro que volveré el año que viene. ¡Qué suerte la mía!... ¡Vivo en la misma ciudad que el restaurante!

Una experiencia de otro nivel. Un sitio sorprendente, con una decoración muy cuidada que auna de forma magistral lo clásico con lo moderno. Y la comida y el servicio, fantásticos. Una experiencia altamente recomendable. Merece la pena.

Cómo digo en el título un expectaculo Gastronómico hay que venir al menos una vez en la vida y si tienes la economía a tu alcance una vez al año, Felizidades a todo el equipo.

Menú degustación muy muy bueno. Primera vez que íbamos a un sitio tan caro y no teníamos claro si saldríamos satisfechos pero si, bien bien contentos. Prácticamente todos los platos nos impresionaron, pero alguno se salió. En los entrantes, el pimiento espectacular. El resto también muy bien (la tortillita impresionante lo fina que era). En cuanto a los platos, los que deberían de estar siempre en el menú son el morrillo y la kokotxa. la quiquilla y las raíces de algas nos parecieron también por encima del resto, pero en general muy muy impresionados. La mantequilla con el brioche, así como la planta salada entre rocas, es algo que suma muchos puntos. Los postres genial también, aunque la galleta de mar de los mejores postres que hemos probado nunca. Si tuviera que poner un reto... Me faltó igual una bebida "del mar". Y si tuviera que poner un pero, los vasos que al ser opacos los camareros no saben si te falta agua o no. Atención super buena. Recuerdo para siempre.