Alameda Beach en Finestrat

No entiendo los malos comentarios, por qué los trabajadores son muy currantes y hacen todo para que el cliente tenga toda la atención requerida como se merece , un lugar para desayunar y pasar un rato muy agradable, con un menú y una vistas inigualable al mar , en hora buena equipo

Solamente vengo a agradecer el genial trato que el nuevo camarero “Sahil” (espero haberlo escrito bien) ha tenido con nosotros. Se le ve muy joven y nos hemos sentido muy cómodos con sus bromas y su atención

Siempre que vamos a la playa de la cala Finestrat, nos gusta mucho tomar un café, helado o dulces. Es un sitio con vistas muy bonitas. Nos atendió la última vez que estuvimos el camarero Sahil, era su primer día, a pesar de ello, un joven muy simpático y amable. Un local ideal por el sitio y el trato que recibes. Sin duda alguna, seguiremos yendo cada vez que podamos.

Este sitio va de mal en peor. La dejadez es evidente en todos los aspectos. El servicio es muy deficiente: los camareros atienden con desgana, como si te hicieran un favor, y eso si tienes suerte de que se acerquen a la mesa. Ni siquiera han sido capaces de actualizar el horario en Google Maps. Es una pena que, estando en una ubicación tan privilegiada como La Cala, se le dé un uso tan pobre y descuidado.

La comida tiene una relación calidad-precio bastante buena. El café siempre tiene el mismo sabor, bastante bueno. El servicio depende de quién te atienda. Un camarero es amable, el otro puede parecer un poco grosero. Reírse a veces es un problema... una pena, yo mismo vengo del sector hotelero y sé muy bien que cuando muestras amabilidad, recibes el doble (de propina) de tus clientes. Un punto a favor para el dueño/cliente.

Un agradable bar a la orilla del mar con maravillosas vistas, precios asequibles y comida deliciosa. El personal es amable y trae el pedido rápidamente. El interior es precioso, hay música de fondo que crea un ambiente agradable y, lo más importante, hay un resguardo del sol. ¡Recomiendo visitarlo!

Excelente comida, ambiente y vistas impresionantes a la playa.

Un pequeño gran lugar para almorzar o tomar una copa justo al lado de la playa. Vine aquí una noche para tomar unas cervezas al atardecer y luego nuevamente para el brunch al día siguiente y realmente lo disfruté. A un precio razonable, la comida era decente (los huevos revueltos con tostadas eran hermosos) y el servicio fue relajado y educado. Definitivamente sería mi lugar "junto a la playa" para almorzar si tuviera tiempo de pasar un día en la playa.

La comida estuvo deliciosa las 3 veces que visitamos, servicio agradable, educado y rápido, personal y ambiente encantadores, volveremos

Buena atención del camarero, aunque el verdejo no está suficientemente frío. Buen precio y excelentes vistas al mar. Ahora bien, en la puerta del local se puede leer que los baños son exclusivamente para clientes. Sin embargo, el baño de hombres por no tener, no tiene ni tapadera. A ver si os hacéis eco del tema y lo solucionais.