Los mejores restaurantes de cocina tapas en Ayamonte

09/06/2024: Simplemente increíble: ¡una de las mejores comidas que he probado! Probamos la mayor parte del menú (o eso parecía) y todo estaba al siguiente nivel. Las ostras con espuma de frutos rojos; el caviar con salsa de soja y la lima estaban exquisitos. El ceviche baby fue increíble: lo mejor que tuvimos (aunque elegir un favorito es difícil). El curry tikka masala fue el mejor tikka que he disfrutado jamás. El risotto con trufa también excelente. La lasaña de marisco blanco también estaba llena de sabor y era única: vale la pena probarla. Los “muy buenos” y que se disfrutan mucho, pero no tanto: las croquetas, el atún aleta amarilla. Lo único que tuvimos que estuvo "bien": el niguiri. Agradable, pero los sabores de todo lo demás resaltaban tanto que era demasiado manso. La mesa cerca de nosotros tenía la vaca agnus y se veía bien, pero no teníamos envidia de la comida. Lo lamento: no haber pedido la burrata, se veía increíble, ¡la próxima vez! Resumen de bebidas: los vinos recomendados por la casa eran geniales. El cava estaba "bien". Margarita no era demasiado dulce. Resumen del postre: la mousse estaba “bien” (no está mal, pero demasiado avellana para mi gusto). ¡La tarta de queso del martes fue más que excepcional! La clave del éxito: opte por el estilo tapas en todo. Ordene generosamente y comparta. Ah, y haga reservas con MUCHA antelación (con meses de antelación, vale la pena planificar la visita).

08/06/2024: Todo exquisito Local bonito, personal atento y sobretodo la comida, estaba todo buenisimo

08/06/2024: Me fui de este sitio porque el dueño es un maltratador y acosador de empleados.

05/06/2024: Pretencioso y sin mucho sabor. Carísimo para lo que ofrece. Sus platos son un batiburrillo de ingredientes que parecen seguir este patrón: un ingrediente principal que conoces mezclado con al menos otros dos más , éstos exóticos, y una corona de una especie de pan chino en lo alto; el resultado: una mezcla amorfa de sabores en la boca que recuerda terriblemente a los restaurantes chinos de polígono (si, sales con el mismo poso en boca y lengua de todos los sabores y ninguno, muy cercano a la imprenta que deja el glutamato monosódico). En cuanto al ambiente: decoración típica de bar moderno, perfecto para instagramers y gente que aspira a parecer chick y cool. Trato impersonal por parte del personal, aunque son tremendamente eficaces y parecen bastante organizados. La experiencia se vió francamente palidecida al comparar su cocina con la portuguesa, que habíamos podido disfrutado ese mismo día y varios días atrás. Ya no solo por tener los lusos un precio más acorde, no, sino por ofrecer claramente mejor producto, menos pretensiones y más lógica en la combinación de ingredientes y preparación de los platos. Ni volveré ni lo recomendaré.