Los mejores restaurantes de cocina pasta y pizzería en el barrio Delicias de Madrid

16/05/2025: Decir que la experiencia con este restaurante ha sido lamentable es poca. Siempre trato de ser educado con el personal porque sé que esta clase de trabajos de atención al pública es muy dura, pero me he sentido completamente estafado y no me queda más remedio que ponerme serio. Realicé un pedido a domicilio que nunca llegó y tras llamar al restaurante lo único que me decían era que contactara con Just-Eat, desentendiéndose, alegando que ellos habían "entregado el pedido al repartidor" (¿si entregan tan mal, por qué acuden a Just-Eat para sus pedidos? E imagino, que por supuesto, la pizzería tendrá un beneficio económico de esto, pero eso sí, si toca asumir algún tipo de responsabilidad... pues eso ya para otro día). Solo me intentaban remitir a otros números cuando le pedí la entrega del pedido o la devolución del dinero: o que contactase con Just Eat, o que llamara a la "oficina de atención al cliente de la empresa (Pizzería Carlos)" (¿para qué? ¿para qué me dijeran lo mismo, pero esperando hasta el lunes?). Just-Eat, de primeras, también me alegó lo mismo, remitiéndome al restaurante. Por supuesto, no había ningún tipo de prueba que mi pedido hubiese sido entregado, y cuando realicé el pedido a Pizzería Carlos me salió un mensaje como el de la imagen que adjunto. La verdad es que es muy triste la sensación de desprotección total del consumidor. Todo por parte del restaurante fue "no estoy autorizado", "llama a esta oficina", etc. Finalmente, me costó dios y ayuda, 1h. de llamada en llamada, para que Just-Eat al final fuera el que se comprometiera a reembolsarme el pedido, pues también me quejé a ellos.

16/05/2025: Imposible el trato con el restaurante, no confiar en esta empresa para el recibir pedidos. No recibimos nuestro pedido y el restaurante se desentiende, me manda a solucionar con Just Eat, y la consultora me manda llamar al restaurante y no solucionaron por ningún lado. No puede ser que tengan tanta indiferencia con el destino de sus pedidos y conformarse con el simple hecho de haber cumplido entregando al repartidor.