Los mejores restaurantes en Riaño
8,4
2075 Opiniones |
|
Restaurante El Mesón
Riaño, <20€
31/08/2025: Comida y servicio espectaculares. Nos encantó y volveremos!
31/08/2025: Buena atención, buena comida y raciones generosas.
8,0
664 Opiniones |
|
Hotel/ Restaurante Sainz
Riaño
31/08/2025: Un lugar encantador. Buenas habitaciones, personal maravilloso, buena comida. Sólo le recomendanos instalar aire acondicionado y ventiladores. Las olas de calor han venido para quedarse
29/08/2025: Un servicio absolutamente de diez en todo, como siempre que nos dan de comer aquí nos tratan genial.
8,0
2563 Opiniones |
|
Parrilla el Molino de Huelde
Riaño, 30-45€
04/09/2025: Comida de calidad a buen precio.
Recomendable reservar.
03/09/2025: Paramos a comer aquí pq queríamos probar los típicos cachopos,llegamos a las 15:00 i no tenían mesa te tocaba apuntarte en una lista donde había 1h de espera que al final fueron 2h!! La comida estaba buena i en abundància pero terminamos a las 5 de la tarde en acabar de comer por el servicio lento....
6,6
756 Opiniones |
|
Restaurante Tanis
Riaño
02/09/2025: La comida buenísima, comimos una judías con chorizo de lujo y codillo también muy bueno.
30/08/2025: Servicio agradable y un empedrado de 10!
5,2
1874 Opiniones |
|
Restaurant Hotel Presa
Riaño
26/08/2025: En el peor sitio donde hemos comido, el trato de un camarero dejaba mucho que desear.. no se acordaba de lo que habíamos pedido, su actitud poco apropiada, la comida mala y cara. Al final nos cobraron de más y tuvimos que reclamar. Si no queréis pasar un rato desagradable no vayáis a este lugar.
26/08/2025: fuimos a cenar. El trato del personal es lamentable, ni te miran cuando te tratan. La comida estaba bastante bien, aunque a precio de madrileño
2,2
298 Opiniones |
|
La Taberna de Ana
Riaño
16/08/2025: Si buscas un bar de carretera donde la amabilidad brille por su ausencia y la experiencia gastronómica roce lo surrealista, has llegado al lugar indicado. La dueña —único ser humano que atiende el local— tiene el don de recibirte como si fueras una molestia cósmica en su vida. Pedirle algo es casi un acto de valor, porque la espera será larga y la cara que te pondrá, inolvidable.
La cocina es un espectáculo: pides patatas fritas, porque ves la freidora… y aun así te caen en la mesa unas patatas de bolsa. Pides una hamburguesa al punto, y descubres que aquí la carne se cocina con un solo estilo: “carbonizada con huevo frito al aroma de grasa milenaria”. Y ojo al “bocadillo vegetal”: pan de hamburguesa, una hoja de lechuga que ha visto días mejores, un tomate en fase de desaparición y una gloriosa montaña de atún aceitoso de lata. Pura dieta mediterránea.
El clímax llega al pedir el ticket: primero un suspiro indignado, luego un garabato a bolígrafo que pretende ser factura, y como guinda… precios que no cuadran ni con la carta ni con la realidad. Cuando lo señalas, te informan —muy ofendidas— de que “los precios han subido”. Sin avisar, sin cartel, sin pudor.
Y por si no bastara, cuando aún estás con la servilleta en la mano, limpiándote la boca tras semejante festín, la dueña aparece para recordarte con tono marcial que “ya es hora de cerrar”. (Lo indica señala indicando el cartel de precios obsoleto.
En resumen: este bar no es un sitio para comer, es una experiencia sociológica. Una parada obligatoria para aprender como no hacer las cosas.
16/08/2025: La amabilidad no es su fuerte. La cerveza en vasos de plástico. Atencion lamentable
1