Los mejores restaurantes con pedidos a domicilio con pedidos para llevar de cocina comida rápida en Las Rozas de Madrid

15/10/2025: Mantiene la esencia de siempre y con cosas nuevas. Buenas ofertas y rapidez. La comida es fast pero buena y original.

09/09/2025: Me encanta la atención pero siempre hay mucha gente a la hora que voy, la chica pasa muy sonriente y amable

25/10/2025: Muy rico la merienda! Gente amable...

08/10/2025: Ricos, los empleados no son especialmente amables en ninguno de sus establecimientos, el ambiente agradable

24/10/2025: Un mc más ....tampoco se puede pedir mas

07/10/2025: McDonald's solía ser conocido por su consistencia y conveniencia, pero tras el reciente escándalo, es imposible ver la marca con los mismos ojos. Lo que debería haber sido una comida sencilla ahora parece una apuesta arriesgada por la calidad y la seguridad. El verdadero problema es la confianza. Una vez que los clientes empiezan a cuestionar el verdadero contenido de la comida, la base misma de la marca se derrumba. En lugar de respuestas claras y una rendición de cuentas transparente, McDonald's ha respondido con silencio, declaraciones vagas y manipulación corporativa. Para una empresa de este tamaño, con millones de familias que dependen de ella a diario, esto es simplemente inaceptable. Visitar los restaurantes solo refuerza esta decepción. La calidad de la comida es irregular, a menudo servida tibia o mal preparada. El servicio es apresurado e impersonal. La limpieza en varios locales está por debajo incluso de los estándares más básicos. Sumado a la sombra del escándalo, cada bocado ahora se siente teñido de duda. Es impactante que un líder mundial se haya permitido caer tan bajo. McDonald's cuenta con los recursos para establecer los estándares más altos de la industria, pero en lugar de ello ha optado por atajos, recortes de costos y control de daños. El escándalo dejó algo claro: las prioridades de la marca no son los clientes, sino las ganancias. Para mí, McDonald's ya no representa seguridad, confianza ni valor. Hasta que la empresa implemente cambios reales y visibles, empezando por la honestidad, no puedo recomendarla a nadie. Se supone que los arcos dorados simbolizan la felicidad, pero ahora solo nos recuerdan lo que sucede cuando se rompe la confianza.