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17/11/2025: Me denegaron la entrada con mi perro de asistencia certificado. Cinco tipos de perros de asistencia médica han sido reconocidos oficialmente en España. Esto proporciona mayor claridad, igualdad de derechos en todo el país y mejor protección tanto para los usuarios como para los animales. El decreto fue adoptado por el Gobierno español el 27 de mayo de 2025 y ahora se aplica en todo el territorio nacional, mientras que anteriormente su aplicación variaba según la región. El primer grupo son los perros guía. Son probablemente los más conocidos y asisten a personas ciegas, con discapacidad visual o sordociegas. Guían a su compañero de forma segura a través del tráfico, evitan obstáculos y permiten que su dueño viva de forma más independiente. Pensemos, por ejemplo, en alguien que puede cruzar la calle o moverse con seguridad por un supermercado abarrotado gracias a su perro. También existen los perros de alerta auditiva. Estos perros están entrenados para alertar a las personas con discapacidad auditiva sobre sonidos como el timbre de una puerta, un despertador o incluso cuando alguien los llama por su nombre. Luego, guían a su dueño hasta la fuente del sonido. Imaginemos que se declara un incendio y suena una alarma: un perro de alerta auditiva puede alertarles inmediatamente y guiarlos hasta la salida. El tercer grupo son los perros de asistencia para la movilidad. Estos perros ofrecen apoyo práctico a las personas con discapacidad física. Ayudan a abrir puertas, recoger objetos, encender y apagar luces e incluso empujar sillas de ruedas. Por ejemplo, si una persona en silla de ruedas deja caer algo, el perro lo recoge y se lo devuelve. También están los perros de alerta médica. Estos están especialmente entrenados para detectar cambios en la salud de su dueño, como fluctuaciones en los niveles de azúcar en sangre debido a la diabetes o el inicio de una crisis epiléptica. Un perro puede, por ejemplo, avisar a una persona diabética para que se administre insulina, o permanecer junto a su dueño durante una crisis epiléptica e incluso pedir ayuda. Finalmente, existen los perros de asistencia para personas con autismo. Ofrecen apoyo proporcionando estructura y seguridad, reduciendo la tensión o las situaciones estresantes y facilitando la interacción social. Pensemos en un niño que se asusta fácilmente en un entorno concurrido: el perro puede calmarlo y distraerlo o sujetarlo físicamente si surge algún peligro. Con estas cinco categorías, los perros de asistencia en España cuentan por fin con un estatus claro y uniforme. Su labor va mucho más allá de la compañía: son una parte esencial del cuidado y la calidad de vida de miles de personas.

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