Un lugar altamente recomendable para disfrutar de unas copas en Logroño, situado muy cerca de la calle Laurel, que ofrece licores de primeras marcas y de excelente calidad, algo cada vez más difícil de encontrar. El DJ residente destaca por su amabilidad y atención, lo que hace que el cliente se sienta bien recibido desde el primer momento, incluso en una primera visita.
Especial mención merece Ana, una de las camareras, cuya profesionalidad es digna de reconocimiento. Con mi amplia experiencia en el sector nocturno, en la selección y formación de personal, puedo afirmar que posee un gran potencial a pesar de su juventud. Su trato es siempre cordial, mantiene una actitud positiva y trabaja con gran dedicación. Sería deseable que la dirección valore y cuide su talento, ya que profesionales de su perfil son cada vez más escasos.
Gracias volveremos sin duda !