Tragabuches Marbella Dani García en Marbella

El ambiente es espectacular ya que nos pusieron en una mesa redonda al fondo y se está fenomenal. Además la ludoteca para los niños está muy bien con una monitora, mis hijas no se querían salir de allí. La comida riquísima sobre todo los torreznos y la ensaladilla rusa con jamón.

¡Las expectativas estaban justificadas! El restaurante abre a las 19.30, está en una zona remota, pero la comida y el servicio merecen la pena ir a este restaurante. La inesperada sopa de cerezas también se hace con tomate, me gustó. Los postres también eran muy sabrosos.

Espectacular en todos los aspectos: carta, servicio, ambiente etc.

La comida muy rica!! Comparado a otros restaurantes del mismo Dani García ,este nos pareció que está un poco por debajo!!! Pero por lo general la comida bien! El servicio en los otros mucho mejor! No hablo por el que le toco servirnos ,lo digo en general ,por cierto las croquetas de jamón y el gazpacho de cereza Recomendado.

Restaurante muy bonito, el servicio es excelente. La comida muy rica. Tienen una ludoteca para los niños que está genial. Nos ha encantado todo! Volveremos seguro!

Un gran restaurante para pasar un buen rato. Especialmente si tienes niños pequeños. Habitación infantil con animador/niñera. Los niños comieron y salieron corriendo a jugar. La calidad de la comida es excelente. El servicio es un buen cuatro.

Un sitio maravilloso...con un servicio excelente y una comida DELICIOSA... Recomendado 100x100... A nivel menú tiene una carta bastante completa... Para pedir platos sueltos es más elevado el precio aunque todo merecido según la calidad y el servicio prestado.

Excelente calidad, buen servicio, bodega abierta, hasta los platos más sencillos fueron revisitados de forma deliciosa.

Después de haber disfrutado de comidas excepcionales en Tragabuches en Madrid en varias ocasiones, la experiencia en su ubicación en Marbella fue lamentablemente decepcionante. La ejecución general careció de delicadeza y la mayoría de los platos carecían de sabor. Las navajas, que recuerdo que estaban exquisitamente preparadas en Madrid, llegaron secas y arenosas. El rabo de toro era sorprendentemente suave y carecía de los sabores ricos y profundos que debería ofrecer este plato clásico. Si bien el lomo de res se cocinó a la temperatura adecuada, también sufrió falta de condimentación. Las chuletas de cordero, aunque fueron lo más destacado de la noche, estaban un poco demasiado cocidas y no lograron la suculencia que uno esperaría. Quizás fue simplemente un mal día para la cocina, pero la consistencia que marcó nuestras experiencias en Madrid estuvo notablemente ausente. El restaurante cuenta con una decoración elegante y un servicio excepcionalmente amable. Sin embargo, la calidad de la comida simplemente no justificaba los precios elevados.

buena comida, ambiente espectacular