Terra en Palencia

Restaurante que dispone de varias zonas diferenciadas, la de barra y dos espacios de comedor, además de la terraza. La carta es más bien corta, pero con cierta variedad. Dispone de menú diario y otros tipos de menú degustación. Los platos se distinguen por la mezcla de sabores de los diferentes alimentos que se complementan perfectamente. A destacar el solomillo al carbón. La relación calidad precio es acorde y la atención del personal muy bien.

Comida innovadora.Coincidimos con las jornadas gastronómicas del lechazo y pedimos el menú de esa opción y lo acompañamos con maridaje de diferentes vinos. Todo muy bueno.. el servicio estuvo a la altura de los platos. Todo muy bien explicado.. quizás el ambiente falló un poco ya que teníamos unos comensales al lado muy ruidosos. Pero el trato por parte de los camareros fue excepcional..

Gran experiencia gastronómica. Ha sido una gran experiencia comer en Terra Palencia. El menú de mercado que hemos comido ha sido fantástico. Comida exquisita y de gran calidad, buena presentación de las elaboraciones, trato de los camareros inmejorable, local acogedor y ambiente agradable. Enhorabuena a todo el equipo.

Me fui con una sensación agridulce, fui con mi pareja a cenar el menu degustacion y la verdad que algunos platos no me convencieron (quiza puede ser pir gusto personal) , otros estaban ricos, aunque también he de decir que hay que dar una segunda oportunidad a los sitios porque vimos el jarrete de ternera a otra mesa y tenía una pinta espectacular, muchas gracias.

Un sitio agradable y tranquilo para cenar. Comida, espectacular, tanto la presentación como la calidad de sus platos, por no hablar de la vajilla, que era preciosa! Bien merecida esa estrella Michelín!!

Pequeño rincón escondido en la secreta ciudad de Palencia que debes visitar

Es la segunda vez que comemos en este Restaurante. La primera fue una experiencia muy buena, pero la segunda fue excelente. Desde que entras el trato es acogedor y la atención, por parte de todo el personal, sumamente profesional. El local muy confortable. La presencia de las mesas muy buena y limpieza por todos los sitios. Las explicaciones de cada plato son pedagogía culinaria. La elaboración de muchos platos son presenciales, y van acompañadas de todo tipo de explicaciones sobre el proceso. Los productos de calidad. Las carnes y pescados que comimos estupendos y bien guisados. El tiempo de espera muy correcto, casi imperceptible entre las distintas fases de la comida. Estamos deseando volver a Palencia y repetir la experiencia. Todo un "lujo" para la Ciudad.

Un interior de estética funcional-actual y una cocina de tendencia moderna. Un menú de degustación que no te decepciona.

Un grandísimo acierto,platos muy cuidados y trabajados, deliciosos,sin duda de nivel de estrella michelin,el chef Roberto Terradillos es un trabajador incansable y ese trabajo con técnica se nota y mucho en los platos, el producto es excepcional, los camareros un 10 especialmente el que nos atendió en mesa, superprofesional, Creo que Roberto llegará a donde se proponga por que me parece una persona sencilla y humilde con un potencial brutal,volveremos.

Hemos estado comiendo el Menú Degustación (59'75 € incluyendo agua y pan) y hemos quedado satisfechos ... pero un menú de este tipo es para que el cocinero se luzca y muestre lo mejor de su técnica culinaria. Pues bien, el chef Roberto Terradillos lo hace bien, pero aún ha de mejorar porque hay detalles por pulir y platos que no están conseguidos. Veamos. Los cuatro aperitivos están bien, aunque la 'aceituna gorda rellena' ... es un poco simplona. Ya metidos en el menú, el 'mejillón en escabeche con emulsión de judía verde y cecina' está bien. La 'aurora de cangrejo de río' no nos gustó, es una preparación fallida. El 'huevo frito con crema, picadillo de matanza y láminas de trufa' resultó sabroso y original. El 'atún con jugo de alubia y vinagreta', bueno, quizá un poco pasado de punto. El 'taco de lechazo' sabroso, aunque yo lo hubiera disfrutado más con más picante. El postre fue 'flan de chocolate con helado de avellana'. Bien. Gustará a los muy golosos. Para mi gusto excesivamente dulce. Pan muy bueno. Café correcto y carta de vinos interesante y comedida (disfrutamos de un excelente crianza de Rioja 'Marqués de Vitoria' por solo 16 euros). Finalmente tres personas pagamos una cuenta de 200 euros. Todo bien, pero aún ha de mejorar si quiere aspirar a más altos reconocimientos.