Taberna La Tana en Granada

Taberna con solera muy bien cuidada, con raciones riquísimas y una gran carta de vinos por copas. El servicio muy amable y profesional. Ambiente muy local, estando muy cerca del centro.

En La Tana disfrutamos de una magnífica selección de tapas sofisticadas. Las alcachofas y las habas con jamón estaban buenísimas, y la selección de vinos era de primera. ¡Sin duda, merece la pena visitarlo para disfrutar de una comida perfecta en pareja!

Taberna en pleno centro de Granada. Destacar su cuidada carta de vinos

Muy buena la calidad del producto y muy bueno el servicio.

Tras una serie de comidas estupendas la semana pasada en Andalucía, que fueron mejorando en calidad y sabor, me alegro de que La Tana fuera una de las últimas. ¡Guau! Comida increíble. Sabores delicados, un menú inesperado (esturión ahumado y confitado, filetes de sardina en salmorejo, butifarra blanca) y un vino excelente. ¡Muchas gracias!

La Tana es una vinoteca muy conocida en el centro, con una impresionante carta de vinos por botella y una amplia selección por copa. Como solo sirve cocina fría y siempre está lleno, recomiendo reservar el segundo turno para evitar las prisas y disfrutar del agradable ambiente tradicional del lugar.

Local popular con mesas en una calle peatonal lateral. Excelente selección de vinos y buen servicio, pero la comida (algunos platos raros) fue decepcionante y un poco cara.

Las tapas son deliciosas y las porciones son justas. La carta de vinos por copas es bastante extensa. El personal es atento y amable.

Sitio de vinos. Lo tenía marcado para ir durante mi visita a Granada y posteriormente nos lo recomendó una amiga entendida en vinos y sencillamente acertamos. Pudimos degustar unos vinos muy bien aconsejados por la camarera. La verdad que fue un gran acierto.

Un acogedor y encantador bar de vinos con una extensa carta para elegir. El menú se puede ver con el código QR que aparece en la mesa. Hay mesas tanto en el interior como en el exterior. Se puede reservar fácilmente en línea. Destacan por los tomates frescos que utilizan y los embutidos que acompañan al vino. El resto, en mi opinión, es, como mucho, normalito. No pude comprobar si había baño, pero supongo que hay tras una puerta interior. Me sorprendió descubrir que solo ofrecen una tapa de cortesía durante la cena, independientemente de cuántas bebidas se hayan pedido. Por reseñas anteriores, vi que podrían haber ofrecido al menos una segunda tapa en el pasado. En general, es un buen lugar para amantes del vino, pero no para quienes buscan la experiencia tradicional granadina de una tapa por bebida.