Primer Plato - Mariscos y Guarniciones Variadas: Este plato presenta una sinfonía de mariscos acompañados de guarniciones cuidadosamente seleccionadas. A la izquierda, una sepia a la plancha exhibe un delicado glaseado de aceite de oliva y hierbas, que le da un brillo apetecible. La carne parece tierna y bien cocinada, resaltando su frescura. Al lado, un camarón grande, también con un toque de aceite y hierbas, añade un toque vibrante de color y sabor marino. En el centro, anillos de calamar rebozados ofrecen una textura crujiente que complementa la suavidad de los demás ingredientes del mar.
A la derecha, unas patatas doradas al punto, sazonadas con lo que parece pimienta negra, aportan un contraste de texturas y un sabor cálido y reconfortante. Al fondo, una ensalada de vegetales frescos —lechuga, zanahoria rallada, remolacha, maíz— introduce notas de frescura y un ligero toque de dulzor, equilibrando los sabores intensos del plato.
2. Segundo Plato - Caracoles en Salsa Tradicional: En el segundo plato, observo una cazuela de caracoles en una salsa rica y bien condimentada. La presentación en una cazuela de barro resalta el carácter rústico y auténtico del plato, evocando una receta tradicional con un toque hogareño. Los caracoles están acompañados de trozos de verduras (zanahorias, pimientos y cebolla) y lo que parece ser jamón o panceta, ingredientes que aportan un sabor profundo y umami al caldo. La salsa tiene un color vibrante que sugiere una cocción lenta, permitiendo que los sabores se concentren y los ingredientes se fundan en armonía.
En conjunto, ambos platos muestran una mezcla de sabores intensos, texturas variadas y una presentación que, aunque sencilla, evoca el alma de la cocina mediterránea y la atención al detalle en el tratamiento de los ingredientes frescos.
Juan H.
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12 Noviembre 2024
10,0