Smooth en Zaragoza

Fuimos 2 personas a comer y compartimos; bao de toro y mayonesa de siracha, quesadillas de langostinos, sacoti de pera con crema gorgonzola y la costilla a baja temperatura con salsa BBQ. Imprescindible pedir las quesadillas de langostino, muy muy ricas. La costilla también estaba en su punto, la salsa BBQ no era muy fuerte y estaba equilibrado. En definitiva, es un sitio que merece mucho la pena con buena relación calidad-precio

Ambiente y decoración buena . El lugar estaba limpio . La comida estaba rica pero los nachos podrían ser mucho mejores ya que los platos y postres estaban muy ricos pero los nachos muy decepcionantes como si fuesen de un lugar de comida rápida 😕

Andrés el camarero muy amable y excelente servicio, la comida igual de espectacular, volveremos pronto. 😎

Un sitio ideal para cualquier ocasión. En pareja, familia, amigos… La comida es una gozada, los platos están muy bien pensados. Para mí un esencial en Zaragoza. Lo que más me gusta es el ambiente que tiene, sin duda originado por el personal de sala. Esta vez nos atendió una chica joven rubia. De 10. En general todos educados, atentos y abiertos a recomendar y asesorar a la hora de elegir el plato o la cantidad de las raciones. Hemos ido varias veces y volveremos sin duda.

Que mal. Llevo años yendo de vez en cuando pero esta última vez ha sido… platos que venían a la mesa y no habíamos pedido, nuestros platos iban a otras mesas (aunque hago mal diciendo “otras mesas” porque solo había dos; la otra y la nuestra) la cubitera tuvimos que pedirla tres veces, tuvimos que recordarles que nos faltaban platos al menos dos veces. Y el baño, madre mía el baño… “¿Cómo he llegado a interpeñas?” Y eso que éramos el primer turno. Por teléfono me dijeron que tenía que dejar la mesa a una hora, luego resulta que era otra… en fin, la comida rica, bien de precio y bien ubicado, pero el servicio… por favor, dejad de recortar en personal

Fuimos un domingo tres personas y un perro, sin reserva. Con suerte, tenían sitio y pudimos sentarnos en la terraza (los perros no están permitidos dentro). La atención fue magnífica: enseguida nos prepararon una mesa y trajeron agua para el perro, un detalle que se agradece mucho. Pedimos la ensalada de feta, cherries, aguacate y yuca, que fue todo un acierto —fresca, sabrosa y muy bien equilibrada. También compartimos el pollo con salsa de mango, realmente delicioso, y el costillar, cuya carne se desprendía sola del hueso, muy tierno y lleno de sabor. Nos quedamos con ganas de probar otros platos que tenían una pinta espectacular, como los huevos rotos o el brioche. De postre pedimos tiramisú, tarta de queso y torrija. Todos estaban abundantes y riquísimos; imposible elegir, aunque quizás la torrija o la tarta de queso se lleven el primer puesto. En total 81 euros En resumen, una experiencia excelente: comida muy buena, atención de diez y un ambiente agradable. ¡Repetiremos sin ninguna duda!

Buen local, aunque la carta puede cambiar con mas frecuencia.

Servicio muy bueno, y el sitio muy acogedor. Probamos varios platos de la carta y todos muy buenos. Nos atendió Patricia y fue un encanto con nosotros, muy amable y con una recomendación muy acertada de los platos Volveremos seguro

He estado con mi madre y mi hermana y nos ha encantado tanto el servicio como la comida. Lo mejor, las quesadillas 😍😍😍😍

Tras años de ser uno de nuestros favoritos y de recomendarlo incluso, nos hemos encontrado con la sorpresa de que han cambiado carta y eliminado muchos platos. Además han subido precio( ración de Bao de solo una unidad a 5,50€, soso y con una gotita de salsa)y la calidad es peor. Parece cambio de gerencia, orientada a incrementar margen, lo que suele ser peor. Si bajas tu estandard de calidad, los fieles dejan de ir. No nos apetece nada volver y no lo recomendaría ya. Una pena