Sabela, Bar & Food Market en Santa Cruz de Tenerife

Los huevos bendictine, los mejores de la isla. Y el mixto, una locura. Recomendable totalmente

La comida es de 10 buenísima y real,el servicio de 20,las niñas son maravillosas, pero toda la experiencia que pudiera ser la mejor de Santa Cruz en cuanto a los Brunch la destruye el calor infernal del sitio, tuvimos que dejar hasta el café porque no se soportaba tomar algo caliente con tanto CALOR... El dueño debería considerar a su personal sobre todo el que está el cafetería con el calor de la maquina... Es terrible... Con un pobre ventilador que no daba aire ni al de la silla de abajo de el. Que triste porque la comida es maravillosamente brutal!! Gracias a tod@s lamento que para los dueños ni ustedes no los comensales sean importante para ellos!!

Local bien ubicado con una carta variada, aunque encontré los precios algo altos para lo que consumimos

Todo excelente y de calidad. Iría más de no ser por el precio

Fuimos a desayunar porque nos quedaba cerca y fue un acierto. Las tostadas de mantequilla y mermelada era un poco pequeñas pero la de ibérico estaba muy bien. El local es muy agradable y cómodo.

Fui por primera vez a Sabela y, como siempre que pruebo una cafetería nueva, pedí lo más simple: un café solo y un sándwich mixto. Tengo la teoría de que si un sitio consigue que lo básico esté delicioso, es buena señal. Y aquí se cumplió: el café estaba muy bueno y el mixto, simplemente, el mejor que he probado en mi vida. Pedí el más simple, solo jamón y queso, y aun así fue espectacular. Ahora, el precio me pareció excesivo: 6,50 € por el sándwich y 1,50 € por el café... 8 € por un desayuno tan básico me parece demasiado. El local es bonito y acogedor, aunque para lo estético que es, le falta un poco de vida o ambiente. El personal fue amable, pero noté cierta inseguridad en el trato, como si faltara esa cercanía o calidez que haría que el sitio conecte más. En general, me parece un sitio muy bueno y sí, volvería. Pero creo que el precio puede acabar jugando en su contra si no ajustan un poco.

El ambiente es genial. Perfecto para desayunar. Probamos cuatro platos y todos estaban perfectamente equilibrados en sabor y presentación. Recomiendo el sándwich y la tostada Benedict.

Hacía bastante tiempo que no íbamos, decidimos darnos un homenaje, llamamos, reservamos y acudimos. La tosta de cochino negro espectacular, el sandwich J.Hernández (creo que se llamaba) espectacular también, el café rico y el bizcocho de coco y piña un pelín seco (nada que no se pudiera solucionar con un baño en el café con leche :-)). El personal amable, dispuesto y ágil. No es un sitio barato, pero es un sitio que apuesta por la calidad del producto en cada uno de sus ingredientes, y eso se nota y hay que pagarlo. Volveremos!

Es un lugar bastante concurrido, así que los camareros están muy ocupados. Aun así, son muy atentos y amables. La comida estaba muy buena y la limonada estaba riquísima. Todo está bien sazonado y muy rico. Como punto negativo, el zumo que ofrecen no es natural; además, esperaba más opciones sin gluten. No es precisamente barato.

¡Desayuno y café deliciosos! ¡Qué ganas de volver!