Restaurante Seda Club en Granada

Muy buen restaurante con ambiente relajado y excelente servicio.

Muy buena experiencia, la comida rica y el camarero que nos atendió, Manuel, muy profesional y agradable. Repetiremos!

Hay un esfuerzo por hacer buena comida, pero no es suficiente. La comida está bien, pero inconsistente. Pedí rabo de toro pero estaba duro y debería haberse cocinado mucho más tiempo. Aunque la tarta de limón estaba muy buena. El servicio es medio por una sencilla razón: no hay suficientes camareros.

Hemos estado cenando esta noche y hemos salido encantados. La comida deliciosa, el tiradito una pasada, la ensaladilla… nos ha parecido exquisito todo y lleno de sabor. Cabe destacar la atención del camarero que nos ha atendido esta noche. Trato inmejorable, nos ha recomendado platos genial e incluso ha bromeado con nosotros. Personas así hacen de los sitios, además de su comida, sitios a los que querer volver. Muy recomendable.

La brocheta estaba fría pero el resto fenomenal. El chico con barbas encantador y Jennifer muy atenta y cariñosa. Cuando vuelva a Granada, repetiré

Fuimos a almorzar y salimos con una sensación rara. El ambiente es espectacular, un local y una carta muy cuidados que hacen que esperes una experiencia redonda y no fue así. El servicio de sala muy amable en todo momento pero algo despistado, teniendo varios errores y olvidos durante la comida. El ritmo de los platos muy lento, a pesar de no haber demasiadas mesas ocupadas. Mejorando algunos detalles y engranando bien el timing de los platos podría llegar a ser una gran referencia gastronómica de Granada.

Platos bien elaborados con ingredientes seleccionados. El sitio es acogedor, me recuerda a los clubes neoyorquinos de los 90. Probamos las alcachofas ( algunas tiernas y otras menos ), el bacalao y el ojo de bife, estos dos últimas con muy buen punto de elaboración, la carne era un corte increíble. De postre un babá cuyo contraste de texturas me sorprendió gratamente, muy bueno. El personal muy atento.

El brunch es un gustazo. Todo nos pareció de excelente calidad. El servicio muy profesional y atento. Un gran descubrimiento. Eso sí, es caro. Repetiremos.

Ambiente cálido y acogedor tanto en el restaurante como en la azotea. Servicio amable. Buena comida sabrosa, buena carta de vinos. Un poco de champán por copa en el menú sería un valor añadido, pero es un gran lugar para tomar una copa o almorzar o cenar en el corazón de Granada.