Restaurante Saúco en Guía de Isora

Hermosa vista, servicio amable y delicioso pescado fresco.

El atendimiento espectacular, el camarero y la camarera muy atentos y amables, y la comida muy rica.

Muy agradable el lugar, buenas vistas, camareros excelentes. La comida no es muy buena y poca cantidad para el precio que tiene.

La ubicación del restaurante es fantástica, con vistas al mar y a la vecina isla de La Gomera. El servicio es muy amable y rápido. La comida es muy recomendable, especialmente los platos de pescado.

Me encantó este lugar, una ubicación preciosa con vistas a una increíble puesta de sol. El personal es amable y atento; se siente como un auténtico restaurante familiar. La comida es increíble: carnes cocinadas a la perfección, pasta fresca y mariscos sublimes. ¡Fantástico! ¡Definitivamente vale la pena una segunda y tercera visita!

Con vistas al mar, la comida tiene que estar buenísima. Nos atrae una y otra vez. El servicio es muy amable y siempre alegre.

Este restaurante se encuentra en un agradable paseo marítimo de Alcalá. La terraza ofrece unas vistas maravillosas al océano. El personal es amable y atento. Optamos por un aperitivo con dos bebidas, ambas buenas, y un plato de nachos para acompañarlas. Fue una grata sorpresa, y el precio era muy competitivo y, sin duda, justo.

La ensalada muy cara para lo que nos pusieron que fue nada …. Y 16 € menos mal que lo arregló el atún a la brasa y el solomillo a la brasa, muy buenos !!! El servicio de los camareros muy bien , sobre todo el Capitán ….. y el sitio muy bonito para disfrutar de una cena o tomar algo junto al mar .

Lo mejor el camarero que a todo el mundo llama "capitán" es muy agradable ese hombre. La comida está bien, pero algunos platos se pasan de caros para la poca cantidad que trae. Las vistas hacia el mar muy bonitas.

La cocina impresiona, el servicio y el ambiente decaen. El Restaurante Saúco ha sido una apuesta segura para nosotros durante años: platos excelentes, servicio profesional y la sensación de estar sentados en un pequeño templo gourmet junto al mar. Desafortunadamente, nuestra última visita no salió como esperábamos. Servicio: Tuvimos que esperar 43 minutos por la cuenta, a pesar de tres recordatorios. Por otras reseñas recientes, sé que no somos los únicos: varios clientes se han quejado recientemente de un servicio lento o caótico. Esperemos que solo sea un problema de personal, ya que esto arruina considerablemente la velada. Ambiente: La terraza sigue siendo impresionante, pero después del atardecer, estaba simplemente demasiado oscura. Las discretas lámparas de mesa no eran suficientes, así que tuvimos que disfrutar de nuestra comida prácticamente a ciegas. Una pena, porque una buena iluminación podría fácilmente adaptarse. Comida: – Los platos principales y los postres fueron excelentes como siempre: productos frescos, tiempos de cocción precisos y sabores delicados. Sin embargo, mi entrante fue decepcionante: queso de cabra sobre ensalada: presentado de forma impecable, pero servido sin aderezo. El vinagre balsámico Metro que nos ofrecieron no pudo compensar la ausencia. El plato podría mejorarse con unos sencillos pasos: flambear brevemente el queso o colocarlo bajo la salamandra, seguido de un aderezo de aceite de oliva, limón, romero y un toque de miel de palma, y ​​la experiencia gastronómica estaría completa. Relación calidad-precio: Sigue siendo razonable, pero con tiempos de espera más largos y una iluminación deficiente, el resultado es menos armonioso que antes. Conclusión: Saúco sigue siendo una recomendación culinaria, pero la organización del servicio y el concepto de iluminación requieren una atención urgente. Atribuimos las deficiencias a esta noche y esperamos encontrar la inmaculada "perla del Atlántico" que nos ha deleitado durante años en nuestra próxima visita.