Restaurante Olimpo en Mérida

De casualidad encontré este restaurante el propietario y la camarera fueron loque me dejaron sorprendida con tanto amabilidad en seguida me acomodo en la terraza nos servirían un café excelente de echo mi marido se tomó 3 y yo a 2 y después Noe hemos tomado u riquísimo gazpacho con su guarnición estaba riquísimo de echo les solicité un tarjeta pues tengo que volver pero la amabilidad olé olé y olé os recomiendo la verdad que nos sentimos como en casa la camarera es de Brasil pero muy atenta y cariñosa con los clientes la estuve observando y su jefe que no la pierda pue no es solo el trabajo y si como una persona se preocupa por la empresa lo e visto super correcta yes un encanto la gente comentava de lo rica que estaba la comida y que atenta la camarera tienen entrada para minusválidos como yo os recomiendo volveré sin dudarlo

Camareros super simpaticos pero el jefe quejandose cual cacique...

Muy rica comida, todo!! Y sobretodo amabilidad y excelente atención!!

Un lugar muy lujoso pero con precios muy contenidos. Una excelente atención y buena comida.

La comida te hace revordar los momentos mas hermosos que has compartido en familia y sin ser necesariamente español, genial se nota todo el amor por la cocina.

Restaurante tranquilo, reformado y limpio. La comida casera y buena, aunque yo quede satisfecho, he de decir que no soy mucho de comer, pero la cantidad la justa, para una persona que coma algo de más, los platos van un poco justos de cantidad. El servicio y la atención un 10 ; el local tiene terraza exterior en una calle peatonal calle Hernan Cortes 42 tranquila , pero comimos dentro en un local reformado y limpio. Le doy un 8.

Un sitio estupendo para comer y tapear, al lado del Museo Nacional de Arte Romano y el la Teatro. Excelente relación calidad-precio, con un trato maravilloso de Gertru y César, jóvenes y sobradamente preparados. Altamente recomendable.

El menú caro y nada del otro mundo.

Nos han dado un folleto en la calle y hemos pasado a comer. A pesar de ser domingo tenían menús de diferentes precios y comimos muy bien y muy fresquitos. Además el chico que nos ha atendido en la planta de arriba ha sido muy atento y agradable.

Camareros muy amables. La comida estaba deliciosa y la sirvieron con prontitud y una sonrisa. Sin duda, vale la pena visitarlo.