Restaurante Lamaka en Nerja

Experiencia de 10: La localización es impresionante, cada zona dentro del chiringuito es perfecta, la comida espectacular, y el trato del personal inmejorable ¡Volveremos muy pronto!

Las Ostras una delicia, un ambiente fantástico con vistas inmejorables!! Con espacio suficiente para compartir cómodamente entre amigos, seguro repetiremos en la próxima visita a la hermosa Nerja!!

El lugar es precioso, la decoración y el ambiente muy elegantes, el personal amable y atento, los platos para compartir sabrosos y agradables, los platos principales no están a la altura de lo que cuestan en comparación con otros restaurantes. Es precioso. ¿Volveríamos? No, no por el precio, y con esos precios, uno esperaría un servicio superior. Por ejemplo, si se toma una botella de vino, la copa se mantiene llena (sin tener que servirse uno mismo). Hemos estado en otros lugares de la zona más baratos y con mejor atención. Una desventaja importante para mí fue que el baño es unisex y, para mí, no es tan agradable en un lugar tan grande.

Super ambiente, Hugo eres Genial con tu atención Gracias… nos vamos super bien atendidos muchas qué Nota tan chevere desde Colombia para Nerja 🇨🇴🇪🇸🤍

Buen restaurante en Nerja y no masificado , el servicios de camareros genial. La bebida algo cara , un tinto con limón 5,50 excesivo.

Buen ambiente, limpieza perfecta, y muy buen servicio.

Espectacular!! Llevamos años veraneando en Nerja y le faltaba esto. Ubicación inmejorable, atención excepcional y comida buenísima. Muy buenos precios para la ubicación q tiene. Nos vemos el año q viene!!

Un club de playa muy agradable, no muy concurrido, con un personal muy amable y camas limpias. Disfrutamos mucho de una tarde con mi esposa. Lo recomiendo al 100%.

No probé la comida, pero las bebidas eran bastante caras: 17 € por dos copas de vino blanco seco de la casa y un poco de agua. La construcción de este bar/restaurante no ha mejorado la playa de Calahonda para la gente con menos recursos que tradicionalmente la frecuentaba. Ahora hay una terraza con tumbonas muy cara donde antes estaba el antiguo merendero que se hundió durante el confinamiento. Lo bueno es que está muy bien ubicado una vez dentro, aunque estropea un poco las vistas de los acantilados desde arriba y desde el balcón. Le deseo suerte a La Malaka, ya que claramente ha costado mucho dinero y esfuerzo crearlo, pero debería esforzarse por ser más económico.

Con un emplazamiento privilegiado, este restaurante combina una carta variada, un servicio atento y coordinado y un ambiente inmejorable. El trato recibido ha sido de diez y la comida muy rica.