Restaurante La Vieja en Adeje

La comida estuvo buenísima, pero le faltaba ese toque especial. El servicio fue excelente. El ambiente era encantador. Gracias.

La comida estaba deliciosa, aunque un poco cara. Aunque es un restaurante de mariscos, pedimos un filete, que estaba delicioso. También recomiendo la tarta de manzana de postre. Al restaurante le falta música en vivo.

Pedimos cazuela de rape y era el lomo sin más Arroz caldoso con bogavante y parecía meloso y corto de sal Nada del otro mundo menos el precio

Hemos visitado La Vieja en Costa Adeje en muchas ocasiones y esta vez fuimos cuatro personas junto con unos amigos. Como siempre, la experiencia fue excelente y por eso nuestra visita puede entenderse también como una recomendación. Probamos varios platos: un delicioso tartar de atún, una ensalada con tomate, aguacate y cebolla, además de una ensaladilla con langostinos. En el segundo servicio pedimos entrantes calientes: pulpo a la canaria en una vinagreta ligeramente picante (solo echamos de menos que el plato estuviera un poco más caliente para que el pulpo se mantuviera mejor) y unas gambas al ajillo muy sabrosas. El pan es muy bueno; en otras ocasiones incluso hemos probado allí pan negro. Como plato principal tomamos una lubina a la sal para dos personas, más que suficiente. Un detalle especial es que aquí todavía sirven las auténticas papas negras —papas arrugadas de piel oscura y pulpa amarilla—, algo cada vez más difícil de encontrar y de precio elevado, pero que vale totalmente la pena. Para terminar disfrutamos de un sorbete de limón y un barraquito. Con dos botellas de vino, la cuenta rondó los 90 € por persona. No es un restaurante económico, pero la calidad justifica el precio. Por la noche el ambiente es elegante; durante el día se puede disfrutar de las bonitas vistas y del atardecer sobre la bahía de La Caleta. Compartir esta experiencia con amigos hizo la velada aún más especial. Seguro que volveremos pronto.

La hospitalidad y el personal fueron excepcionales, y la cena fue perfecta, acompañada de excelente música en vivo a cargo de una cantante con una voz preciosa. La relación calidad-precio fue un 10/10.

La comida estaba buena pero los precios son muy altos así que tenlo en cuenta si reservas este lugar.

Nada de qué quejarse, restaurante de primera.

Ubicación fantástica, comida y servicio excelentes, justo lo que esperábamos. Fue genial no tener prisa; teníamos mesa desde las 16:30 para ver la puesta de sol a las 18:15, pero al final nos fuimos a las 18:45 y en ningún momento intentaron que nos fuéramos. La lubina al horno con sal estaba excepcional.

Todo genial! Una cena en familia increíble buena comida y buen trato . Os lo recomendamos si queréis disfrutar de una velada en familia frente a unas vistas increíbles y una muy buena cocina.

La atención y servicio por parte de Salva y del resto de personal ha sido excelente y la paella la Vieja muy recomendable.