Restaurante 'El Figón' en Villafranca de los Barros

Vinimos a comer y nada más sentarnos me levanté a preguntar a la camarera (una rubia extranjera, lo específico no por racismo sino para que se especifiqué quién es ya que desconozco si nombre). Me dirijo a ella para preguntarle dónde están los baños ya que somos de fuera y me responde señora siéntese que ahora le atiendo en la mesa. Le digo que perfecto pero que mi pregunta es qué dónde se encuentran los aseos y me indica. Tras venir del baño nos suministra pan y cubertería amontonada y llena de agua. Tras esto viene a tomarnos nota y le pregunto si hay platos combinados como indican en la carta y me responde de manera muy cortante e impetuosa e incluso puedo añadir qué violenta qué primero le dijese la bebida. Me responde que sí tienen platos combinados pero que ya verán la cocina si tienen esos ingredientes a elegir que ofertan o no. Doy un cuatro porque la cocina y el local ha sido de muy buen agrado, pero ya de primeras estábamos a disgusto por la atención recibida de ella. La comida estaba muy buena y ha salido muy rápido de cocina con cantidades generosas. La única falta que puedo poner es el pan que estaba seco y asentado.

Nos han tratado como en familia, son encantadores. Ha estado con nosotros Lili, muy buena profesional y encantadora. Hemos comido muy bien, todo buenísimo y calidad, además de cantidad. Nunca decepcionan. Suerte tenerlo tan cerca. Muchas gracias a Coro por su atención.