Restaurante @ Casa-Museo del Campesino en San Bartolomé

¡Qué grata sorpresa! No esperábamos encontrar un restaurante tan bueno en este destino turístico. ¡La comida estaba exquisita! Muy recomendable. El servicio fue profesional y amable. La comida no tardó mucho, a pesar de que había bastante gente.

Las raciones eran abundantes, pero la comida nos pareció simplemente correcta; en particular, los buñuelos/croquetas de pescado resultaron decepcionantemente insípidos.

Fuimos por recomendación de un lanzaroteño y no pudimos salir más contentos, comida buenísima, casera, vinos locales, atención excelente por parte de todo el personal, cantidades generosas y desde los entrantes hasta los postres buenísimos. Para recomendar sin duda.

Dentro de la Casa Museo El Campesino, su Restaurante merece también nuestra atención. Es preferible y muy recomendable reservar a través de su web en unos pocos sencillos pasos. Si no estoy equivocado, incluso es posible elegir la zona interior o el patio exterior. Dentro se está muy bien. Si bien es cierto que el tamaño de las mesas podría ser un poquito mayor, para dos o tres personas de mediana estatura, la comodidad está muy bien. El servicio es rápido y atento. La comida está francamente buena: el gofio para comer con gajitos de cebolla; el pescado del día, frecuentemente cherne; o los postres, como la tarta de queso con dulce de leche. Si es cierto que no es relativamente barato (sin vino y con postre, para dos personas, entre 75 y 85 euros), merece mucho la pena.

Comida inmejorable. La atención de 10,servicio super atento. Lugar espectacular. Recomendación total

Exquisito desde el entrante hasta el postre (mención especial al pulpo a la plancha). ¡Y qué decir de los camareros! ¡Excelentes consejos y muy atentos! Gracias por este maravilloso descubrimiento de sabor. 😊

Experiencia espectacular. Abian, el camarero, nos trató de 10, siempre atento y preocupado por decirnos lo que llevaba cada plato. Un verdadero Profesional 🔝. La comida exquisita. Desde las salsas, mojos y de más que ponen en los entrantes, hasta el postre. Buenisimo

Platos bien elaborados y postres especialmente logrados.

La visita a la casa-museo está genial, además que es gratuita, y se agradece, pero lo mejor estaba por llegar, que era la comida. El personal que nos atendio fue de lo mejor que hemos vivido en nuestros 50 años (de hecho es mi viaje de cumpleaños). La comida estuvo genial: Salpicón de corvina y pulpo Revolcón de papas, setas y gambas. Tarta de frutos secos....un espectáculo y muy original. Y nos recomendaron un vino blanco semidulce de la tierra que estaba buenísimo, “princesa ICO”. Y terminamos con un chupito de ron miel con toque de limón. Muchas gracias a tod@s por atendernos, pero especial mención a: Laura, Alby, sois los mejores, cerró el espectáculo Jose, con una gran sorpresa (que no puedo desvelar).

Un sitio precioso, muy muy bonito. La atención de cada persona ha sido inmejorable, tanto con nosotros como con nuestro bebé, super atentos y educados. La comida muy buena, la verdad es que viendo el sitio y el trato, me parece hasta barato. Además tuvieron un muy bonito detalle con nosotros. Ojalá haber podido más veces. Encantados de haber ido. Gracias 🥰