Pizzeria La Roda Groga en Besalú

972 59 16 49

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El restaurante

Este restaurante se recomienda por su cocina, se encuentra en Besalú, nos gusta mucho este restaurante por su céntrica ubicación.

En la carta han dispuesto los mejores platos para sorprender a tu paladar, los chef siempre se esfuerzan muchísimo a la hora de elaborar comida pasta y pizzería, es hora de probar su pizza.

Los usuarios de Gastroranking lo han puntuado con un 8.39, la relación calidad precio del restaurante es la adecuada, no es un restaurante caro y su comida y servicio merecen mucho la pena, el restaurante te pone facilidades para pagar, tanto en efectivo como en tarjeta o tickets restaurante.

Si planeas ir en hora punta, mejor reserva tu mesa.

No te sentirás abrumado por su decoración, tu familia y tú seréis más que bienvenidos en este restaurante, es un restaurante del que saldrás con ganas de repetir una y otra vez.

Sabemos que pasarás una velada maravillosa gracias a su puntuación de 8.39 quetiene el restaurante, en su instagram encontrarás las fotos de sus platos.

Puntuación y opiniones

	Opiniones	Nota
Google	495	9.2

	Opiniones	Nota
Tripadvisor	248	8.8

	Opiniones	Nota
Google	495	9.2
Tripadvisor	248	8.8

Un refugio inesperado en un día triste.. Llegamos a esta pequeña pizzería de Besalú en un momento especialmente difícil, y nunca olvidaremos como nos hicieron sentir. La comida era excelente —pizza buenísima, hecha con cuidado e ingredientes de calidad—, pero el que realmente nos conmovió fue la sensibilidad especial del camarero. Con una amabilidad discreta y sincera, supo leer el momento y nos ofreció mucho más que un buen servicio: nos regaló un espacio de calma y confort cuando más lo necesitábamos. Un lugar sencillo, con una gran alma. Gracias por ser refugio cuando el corazón lo pedía.

Más comentarios
en Tripadvisor

Nuria R .

24 Mayo 2025

10,0

Un refugio inesperado en un día triste Llegamos a esta pequeña pizzería de Besalú en un momento especialmente difícil, y nunca olvidaremos cómo nos hicieron sentir. La comida era excelente —pizza buenísima, hecha con esmero e ingredientes de calidad—, pero lo que realmente nos conmovió fue la especial sensibilidad del camarero. Con una amabilidad discreta y sincera, supo leer el momento y nos ofreció mucho más que un buen servicio: nos regaló un espacio de calma y confort cuando más lo necesitábamos. Un sitio sencillo, con un gran alma. Gracias por ser refugio y rescoldo cuando el corazón lo pedía.