Onate en Guadix

Hotel tranquilo y confortable. Muy bien decorado y cómodo. La estancia fue muy buena.

Hotel muy céntrico y cómodo. Hemos estado un fin de semana, en pareja y todo perfecto, la atención muy buena. La habitación cómoda y limpia. El spa pequeño pero suficiente ya que solo estábamos nosotros solos. Merece la pena pagar el parking porque aparcar en la zona en misión imposible.

Hotel céntrico muy bonito y que se come muy bien. El personal muy bien, muy amables. Lo recomiendo para visitar esta preciosa ciudad.

El hospedaje de 10, la cama muy amplia y súper cómoda, nos dejó un poco que desear el restaurante pero bueno ante ninguna otra opción es salvable.

Muy contenta con el hotel pero el desayuno para ser buffet le faltaba un poco de variedad pero en general muy bien la atención, habitación ideal y spa bastante bien, un poco pequeño pero diverso

Comida extraordinaria, muy buena atención en el comedor

Todo un acierto,conocimos el hotel a través de un cupón de smartbox y la verdad que fue todo una maravilla.Empezando por Adela en recepción que es todo un encanto y siguiendo con el camarero que estaba por las mañanas y a medio día en el restaurante,que nos acogieron y aconsejaron como si fuéramos conocidos de toda la vida,así da gusto.Con el resto de personal tuvimos menos trato pero a cual más simpático.Agradecer también a las chicas de la limpieza por lo bien que estaba todo.El hotel está en una ubicación perfecta.El desayuno del hotel nos entraba en la habitación asique por el precio de la caja regalo dormir y desayunar no se le puede poner pega,sí que es cierto que si no entrará posiblemente no lo cogeríamos.El menú del día muy bueno,platos muy abundantes y bastante variedad tanto en primeros platos como en los segundos.El spa que también nos entró muy pequeño pero muy limpio,lo único que hacía demasiado calor y a veces resultaba ser un poco agobiante.Si vuelvo a Guadix o a lo alrededores repetiré sin duda.Gracias a todos por atendernos tan bien

La ubicación muy buena ya que está cerca de todo pero es cierto que el barrio está en ruinas y el hotel es lo que mejor se conserva. El ascensor parece que se va a quedar parado en cualquier momento, el aire acondicionado de la habitación tarda muchas horas en enfriar y el frigorífico igual. El colchón es muy incómodo, nos hemos quedado dos noches y no hemos podido dormir bien. La cisterna goteaba y, aunque se lo dijimos al personal, no hicieron nada por arreglarla. La limpieza correcta, pero no la mejor, el primer día me encontré en la encimera del baño ceniza y la punta de un lápiz de maquillaje. El Spa no está mal pero no lo consideraría de un hotel de 4 estrellas, piscinas de agua "caliente" y "fría" que están templadas y que solo cabe una persona. Además, no son puntuales ya que teníamos el Spa a una hora y no aparecía el personal y tuvimos que bajar a avisarlos para que nos dejaran entrar. No comimos ni desayunamos allí al ver la poca variedad. Me parece un hotel de 3 estrellas como máximo.

Nuestra experiencia en este hotel ha sido muy positiva, el personal tanto de Reepcio'n como del restaurante muy amable en todo momento. El servicio de desayuno y comidas me sorprendió pir la variedad de menús ,lo elegimos por ubicación y al tener un extra de Spa no defraudaha sido un acierto y sin duda lo recomendaremos .

Es el restaurante del Hotel Palacio de Oñate. Un sitio muy tranquilo donde poder comer lejos de las habituales tascas ruidosas de los alrededores. Menú muy asequible, sin bebida (12,50€). Comida sin alardes, al menos la del menú. Buena sin mas.