Un sitio genial para tapear en las negras. El ambiente es encantador, tanto de día con las vistas, como de noche a la luz de las velas bajo el molino. Los perros son bienvenidos, lo que se agradece mucho. Además tienen tapas vegetarianas. El falso perrito veggie es espectacular. Y si os gusta mucho el picante, el taco nivel 7 es una locura de bueno y puro fuego.
Un placer venir a este sitio.
Increíble atención al cliente de todos los camareros, muy atentos. La comida está toda riquísima, destacar, su especialidad, las costillas, tremendas, por otro lado, la autocomanda es muy novedosa y nos gusto mucho la idea, está muy buen ambientado y muy acogedor.
Uno de los ubicados en el Parque Natural que mejor se conservan dado el estado ruinoso en que se encontraba hace unos 50 años.
Actualmente es una oficina de información turística y se puede visitar en verano (15/06 - 15/09) por la mañana (10-14) y por la tarde (16-18) siendo accesible la planta superior.