31/08/2025: Visité el Museu del Vermut de Reus el pasado 19 de agosto con una amiga. No era la primera vez que iba y, como siempre, la comida estaba sencillamente buenísima, de lo mejor de la zona.
Sin embargo, la atención del encargado (un chico alto, delgado y con barba) y de la chica de la barra resultó algo frustrante. Ella apenas sonreía y fue muy seca en el trato. Nada más llegar (sin reserva), nos indicó que nos pusiéramos junto al barril para que el encargado nos viese y valorara si podía darnos una mesa. Nos dijo que dentro no quedaba nada, aunque había varias mesas vacías, y nos ofreció sentarnos en la barra para cenar allí. Justo detrás había barriles con taburetes, mucho más cómodos, y nos comentó que si se liberaba alguno podríamos pasar. Cuando se marchó un cliente tuvimos que movernos nosotros mismos sin que nadie nos ayudara.
Durante la cena, el encargado se mostró algo despistado, llevando platos a la barra sin percatarse de que ya nos habíamos trasladado a los barriles, y en ningún momento pidió disculpas ni se preocupó de recolocarnos. Además, vimos varias mesas libres que permanecieron vacías durante toda la noche.
Lo que sí quiero destacar muy positivamente es la atención de Abel, un camarero andaluz encantador. Cercano, sonriente, amable y con un trato exquisito en cada detalle. Gracias a él, la experiencia fue mucho más agradable. ¡Más gente como Abel hacen que uno quiera volver!
30/08/2025: Tapas y bebidas deliciosas. Probamos tanto el vermut local como los cócteles. Recomiendo encarecidamente el plato de embutidos. ¡El Negroni estaba fenomenal! El personal fue encantador y muy profesional.