Mesón Herrera en Almuñécar

Desde el desayuno (recomendable), hasta la cena, cualquier momento es bueno para comer, tomar cervezas, etc. Buen servicio.

Top...top...dirección para cocina típica y personal...para comer.... Pez arena "excelente, volveremos el año que viene, gracias a la cocina y al personal....top y excelente

Buen servicio y buena comida al estilo español… ¡Cuidado con los bagels enormes! Para dos, más que suficiente.

Primera vez en Almuñécar y este Mesón fue una magnífica opción. Buena relación calidad precio. Camareros majisimos. Buen ambiente. 100% recomendable.

Lleguemos sobre las 3 y nos atendieron rápido , a los niños le pedimos unos filetes empanados y nosotros una fritura , y la familia se pidió otros platos como puntillitas y solomillo , ESTABA TODO BUENISIMO , la tarta piononos riquísima , y el personal muy amable

Muy amable la comida casera y buena calidad

En estos momentos, de los mejores sitios de almuñecar, por su atención, calidad y precio. Muy recomendable. Hemos estado varias veces y siempre e muy bien. Volveremos.

Comida muy buena y abundantes raciones. Quizás el servicio desbordado por la afluencia de clientes, deben mejorar en este aspecto.

Se come de lujo,pescado fresco,las migas estaban muy buenas

Uno de los bares de tapas de Almuñécar. Roscas Lari es famoso, con una ubicación y un ambiente agradables. Las tapas son normales. Tienen tapas de carne y pescado, pero hay que esperar, y después de las 20:30, hay cola para conseguir mesa. Hoy reservamos para dos y llegamos puntuales. Vimos que habían aumentado las mesas y las habían repartido por todo el parque. Como éramos dos, nos sentaron en una mesa pequeña justo al lado de la entrada. Pedimos una cerveza y un vino, pero las tapas llegaron primero, y nuestras bebidas tardaron 20 minutos. A pesar de llevar micrófonos en las solapas, los camareros gritaban, corrían de un lado a otro y miraban fijamente las mesas grandes. Todos corrían a todas; no había mesas compartidas, lo que creaba un caos. Pero si éramos dos o tres, ni siquiera nos miraban. Pedimos una segunda copa, miramos la carta y quisimos pedir rejos. Llegaron las bebidas, pero las tapas no. Le hicimos varias señas al camarero para que pidiera, pero ni siquiera nos miró y dijo que vendría más tarde. Esperamos 45-50 minutos. Finalmente, lo agarramos del brazo y le pedimos la cuenta, diciéndole que era una vergüenza. Dijo que traería las tapas, pero ni siquiera preguntamos qué queríamos comer; le dijimos que no queríamos más, pagamos y nos fuimos. Si quieren tirar el dinero, pueden irse. Nos pasó algo parecido la semana pasada, pero pensamos que estaban llenos, así que no dijimos nada. También pedimos pescado a la plancha y la comida estuvo bastante mal. Pero lo que nos pasó hoy fue una auténtica vergüenza. ¡No vayan!