Mamay malaga en Málaga

Acogida cordial, cocina fuera de lo común, alcachofas para recomendar y el tartar de pulpo, muy gráfico. Camarones pilipili un poco caros. Vinos buenos y económicos.

Uno de los mejores restaurantes en los que hemos estado y visitamos casi toda Europa comiendo en varios lugares. El servicio es muy agradable y amable, la comida es excelente, muy bien presentada, elaborada con ingredientes cuidadosamente seleccionados, no hay aburrimiento. El ambiente familiar no es pomposo.

¡Tuvimos una cena tan encantadora! La pasta con marisco y la lubina estaban deliciosas. Puedo recomendarlo totalmente. ☺️

El personal es muy, muy hospitalario y amable, ¡y el marisco estaba súper fresco!

Servicio super amable y cocina de calidad. Es un poco caro si quieres probar varias cosas pero merece la pena. Tartar de salmón súper bonito pero un poco soso, el ceviche genial y olvidé la palabra en español para el plato, pero las berenjenas gratinadas estaban deliciosas y ¡hay que probarlas!

De verdad, asegúrese de tomar una cerveza. No tiene que esperar al personal; simplemente presione el botón y estará allí. Los elementos del menú que comí aquí estaban bien condimentados; el personal también es amable. La comida más satisfactoria que tuve en España.

Magnifica decoración, estupendo servicio, muy acogedor. Probamos unas alcachofas que estaban de muerte, buñuelos con un sabor auténtico. El ceviche estupendo. Nota de 10 sobre 10.

Podría decir muchas cosas buenas, el ambiente, la atención, todo riquísimo, pero lo que quiero decir es que, sin ninguna duda, lo recomiendo encarecidamente y que pretendo volver. Enhorabuena por la labor y gracias por la extraordinaria experiencia. Un gran descubrimiento.

La verdad que un gran acierto. La decoración del restaurante es preciosa, nos encantó, todo al detalle. El personal de 10, amable, servicial, cercano, hasta la chef salió de la cocina para preguntarnos que tal todo, una cosa que nos encantó. La comida estuvo buenísima toda, había dos opciones, caribeña y mediterránea. Elegimos la caribeña y todo nos encantó. De entrantes, acierto con los Tequeños, nos gustó mucho y más con la salsa que los acompaña. El cocktail de gambas y maracuyá, tampoco hay mucho que decir, normal. Los platos principales son increíbles, los vermicelis negros con almejas, madre mía, lo que llevaba de almejas, increíble y la cotoletta buenísima. De 10 los platos, nos encantó . Los postres, el Brownie era casero muy bueno, pero el postre de limón con chocolate blanco, sin palabras . Lo recomiendo 100%.

Un lugar pequeño lleno de sabor, calor humano, excelente comida, ambiente tranquilo y agradable para compartir con familia y amigos.