Le Bistró by El Conjuro en Granada

La referencia Michelin promete una gran dirección. Situado en una zona tranquila y residencial, un poco descentrada, este restaurante es probablemente la mejor dirección de Granada. Fino, generoso y gourmet, con un servicio de asesoramiento y calidad. Un restaurante que no te puedes perder.

Fui a almorzar el sábado 20 de abril. ¡Estaba delicioso! La comida era excelente, el servicio excelente, el ambiente excelente. Recomiendo encarecidamente una visita.

Es la primera vez que fuimos. Comimos el canelón, el atún kimchi y el sándwich, además de otros entrantes. Todo bueno, pero nos decepcionaron algunos defectos, creo que solventables. En un local de esta categoría se echan de menos, cómo mínimo, unos mantelitos de papel. La cantidad de vino por copas, una vergüenza y a un precio abusivo. El servicio sin ningún esmero. Espero que tomen nota.

Excelente restaurante. Los platos son deliciosos, y generosos. Muy amables y atentos. Si pasas por delante igual no te motiva entrar, pero sería un gran error.

Sitio que aspira algo más pero se queda en el intento. No pongo en duda el esfuerzo que hacen para diferenciar y apostar por ese punto más, pero se quedan en ese intento. La comida aspira a una cocina de autor pero muchos platos se quedan en las gana y ya, por ejemplo su sándwich. El tartar de quisquillas fue lo mejor de la velada. Correcta fue su carrillada. Mención aparte es su carta de vinos, es interesante pero está subidisima de precios, vinos de coste medio de 15 euros en mercado a 50 euros, me parece bárbaro e injustificado. Otro detalle a mejorar, en un sitio que aspira a ese punto más no es de recibo en una reunión de varias personas por el copas de vinos de diferente marca a los diferentes comensales que no lo hacen ni en el bar de mi pueblo. Si tienes copas de alta gama solo para unos cuantos mejor guárdalas y pon gama media a todos o haz una inversión de grandes cops para una reunión de más comensales. El servicio es atento y te explica bien los platos, la cocina hay que mejorarla para intentar seguir arriba en la diferenciación y de la apuesta gastronómica de la ciudad.

Cocina de autor con productos de muy buena calidad, muy bien presentados y elaboraciones deliciosas. La decoración deja mucho que desear para ese nivel de cocina. Las botellas de vino muy caras si quieres beberte algo que no sea cosecha. Hay cuatro marcas contadas de bebidas alcohólicas, por lo que no te tomas una copa cuando terminas de comer.

Espectacular, hay que volver todos los domingos 😍

Lugar digo de visitar y comer alli

Tal y como han mencionado en otro comentario, un restaurante con “luces y sombras”. No es la primera vez que comemos en Le Bistró, ni en El Conjuro de Calahonda, por lo que considero que tengo cierto criterio para no dejarme influenciar por malas impresiones puntuales (un mal día o una mala elección la podemos tener cualquiera) Valorando únicamente la calidad de la comida así como la presentación de los platos bien se podría merecer 4 o 5 estrellas, pero cuando lo ponemos en contexto y se sumamos la cantidad y el precio, ahí se desploma estrepitosamente. Las raciones resultan ridículas en muchas ocasiones, y el precio de la mayoría de ellas te deja un mal sabor de boca por no estar a la altura de lo recibido. Un ejemplo de ello son los postres, entre 8’5€ y 12€ … se escapa a mi entender de lo que debe ser un restaurante, por exclusivo que parezca o pretenda ser. En cuanto a la carta de vinos, hay que reconocer la amplia variedad y precio medianamente razonable (por botella). Ahora, que no se nos ocurra intentar copear alguno, ya que por menos de 5€/copa no podemos esperar nada. De nuevo vuelvo a no entender ese afán de querer darle prestigio al restaurante cobrando la copa de vino a 6€ de media, les invito a todos ellos a irse de vinos por Haro, La Guardia, El ciego, etc y disfrutar de una excelente relación calidad precio de cualquier vino de categoría por menos de 3€. Entiendo que es cuestión de tiempo que el publico general despertemos y dejemos de tolerar ciertos “hábitos” en el mundo de la restauración más allá del bar de tapas granaíno.

Un restaurante muy interesante, en el lugar más inesperado de Granada. Platos originales y primeras calidades. He disfrutado y lo recomiendo. El servicio excepcional, me han hecho sentir cómodo desde el minuto uno. Lo mejor: déjate aconsejar, porque fuera de carta hay muy buenas opciones. Por ejemplo, el lomo de atún sobre vechyssoise de foie estaba muyyyy bueno.