La Tasca del Tío en Santa Cruz de Tenerife

Lo primero que hay que decir es que este lugar está atendido única y exclusivamente por su dueño, Manolo, señor encantador. Al llegar sólo había disponible una mesa con los restos de los comensales anteriores y estuvimos un rato esperando que la limpiaran, hasta que llegó Manolo y nos explicó que la consigna es que cada quien recoja sus cosas y las lleve a la barra pero no todo el mundo lo hace. A partir de ahí entendimos el mecanismo: pides en barra, Manolo te informa el número de tu mesa, luego suena una campana para que lo recojas en barra. La zona es muy tranquila, callejón sin circulación de coches, y el sitio es pequeño y acogedor. La carta es reducida y básica pero la tabla de quesos y embutidos - viene con su pan - y las gambas están muy buenas. El vino va por cuartilla y escoges tú mismo, el te muestra las botellas. Precios super buenos! Conclusión, un lugar distinto donde casi te sientes en una fiesta de amigos donde cada quien le pide al anfitrión lo que quiere y cuando está listo, lo recoge. Sugiero ir temprano pues se llena rápido y mucha gente se queda charlando después de comer y Manolo no bota a nadie, más bueno que un abuelo cariñoso, jajaja.. Volveremos!!!